Tranquilidad en Florencia: «La gente hace vida normal aquí, el miedo viene desde España»

La capital de la Toscana mantiene sus actividades normales, y tal y como asegura esta leonesa, los nervios vienen de España: «De momento la gente hace vida normal aquí, yo también. No se han cancelado las clases, aunque los profesores permiten no ir, no tienen asistencia obligatoria. Los más tranquilos son los italianos, los españoles reciben información de sus familias, se ponen nerviosos y hay un ambiente de paranoia», explica. «Hay mucha gente que ha dejado el intercambio o que se va a España, algunos familiares cancelan visitas. Eso genera este miedo entre los españoles que estamos aquí».

Ella insiste en que por la calle, «la gente va tranquila», sin alterar su vida por esta enfermedad que ha puesto en jaque a varios países. Para esta estudiante de ingeniería, el problema es la prensa, pues «todos los días nos levantamos con el grupo de los Erasmus con varias noticias sobre los mismo hechos, pero cada una con datos diferentes». Esto ha generado una sensación de «mucha tensión» entre los españoles.

Rebeca entiende que la situación es grave, pero también pide calma y tranquilidad: «Muchos familiares son los que generan y contagian el miedo. Estamos aquí estudiando, en vez de meter miedo, hay que tranquilizar, no debe cundir el pánico», expresa la leonesa, que asegura que mantendrá su vida normal, de hecho, en su Universidad, no se han cancelado las clases.

El mismo punto de vista lo comparte Laura, que también está en esta ciudad italiana. Ella es estudiante de Biología, y asegura que sus clases han continuado con normalidad durante esta semana. Lo más raro que ha visto, ha sido en su vuelta a Italia, pues en el aeropuerto de Pisa tuvo que pasar un control de seguridad: «Nos tomaron la temperatura y salvo que dieras algo de fiebre, no había problema».

La estudiante de la Universidad de León comparte el punto de vista de Rebeca, pues cree que existe mucha desinformación en España, causa del caos entre los estudiantes españoles en Florencia. «En la calle hay mucha tranquilidad, yo uso transporte público y en el tranvía he visto a dos o tres personas con mascarilla. No hay mucha paranoia. En las farmacias señalan que las mascarillas y los geles están agotados, tienen carteles anunciándolo. En el supermercado es donde se nota un poco más el miedo, la zona de pastas, de conservas y cosas así están más vacías».