Amenaza de lluvias para los primeros días de Semana Santa en León

La lluvia y el tiempo inestable amenazan con empañar el inicio de la Semana Santa de León de 2025. Aunque las previsiones a largo plazo siempre hay que afinarlas mucho más, lo cierto es que todos los modelos meteorológicos apuntan en una misma dirección: precipitaciones, viento y un ligero descenso de las temperaturas.

El primer fin de semana que arranca con el Viernes de Dolores y finaliza con el Domingo de Ramos puede estar pasado por agua y, con unos pronósticos con bastante posibilidad de certeza al estar a menos de 120 horas, la probabilidad de que así ocurra cada día es mayor. Samuel Biener, experto del Meteored, asegura que «la llegada de la borrasca fría aislada Olivier provocará un importante repunte de inestabilidad en la Península, donde se registrarán lluvias y tormentas, sobre todo durante el fin de semana».

La Agencia Estatal de Meteorología también se aventura a pronosticar unos primeros días con lluvias por culpa de esa nueva borrasca de gran impacto. La perturbación, que empezará afectando a Canarias, el miércoles se acercará a la península Ibérica a partir del jueves.

El cambio de condiciones meteorológicas se empezará a observar el 10 por la tarde, cuando no se descartan chubascos durante la segunda mitad del día que pueden venir acompañados de barro por la llegada de polvo sahariano arrastrado por el recorrido de Olivier. Pero será el Viernes de Dolores cuando el sol dejará de estar tan presente en los cielos leoneses para dar paso a una jornada gris, algo más ventosa, más fresca y con probabilidades de lluvia en torno al 90 por ciento, sobre todo durante las últimas horas de la tarde y primeras de la noche.

La tarde-noche del sábado 11 de abril se prevén lluvias más importantes en toda la provincia. De momento, para Aemet, es la única de las tres jornadas de fin de semana con un cien por cien de probabilidades de lluvia para León. Además, las cantidades recogidas pueden superar los cinco litros por metro cuadrado, incluso diez, en muchas zonas.

La mañana del Domingo de Ramos se espera una pequeña tregua, con cielos más abiertos y lluvias, que de registrarse, serán mucho más débiles y dispersas que las del sábado.

Esas horas de calma durarán poco según las previsiones actuales porque durante la tarde volverá a cubrirse el cielo y las lluvias serán más importantes, sobre todo en zonas altas. Las temperaturas pueden empezar a bajar.

Aunque las precipitaciones pierden fuerza, seguirán presentes en León durante un Lunes Santo en que el mayor cambio que se espera es un notable descenso térmico que vendrá acompañado de una cota de nieve que volverá a bajar de los dos mil metros y volverá a las montañas de la Cordillera Cantábrica.

Son muchos días los que restan hasta la jornada del Martes Santo por lo que habrá que actualizarla cada día, pero si se cumple lo que los modelos meteorológicos advierten ahora mismo será una jornada fría y con lluvias a partir de la tarde en el sureste de la provincia y nieve en el resto, con acumulados importantes en zonas altas.

Con los modelos apurados al límite, el Miércoles Santo se presenta muy similar a la jornada precedente aunque con una ligera mejoría en todos los aspectos: menos frío, lluvia y cota de nieve más alta. El viento seguirá soplando con cierta intensidad.

Para los días que restan desde el Jueves Santo hasta el Domingo de Resurrección la incertidumbre es aún más alta. Las previsiones a largo plazo hablan de inestabilidad y probabilidad de precipitaciones a estas alturas pero todo puede cambiar.

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