Las administraciones públicas de León acatan con diligencia la lucha contra el dispendio energético

Las principales administraciones públicas de la provincia de León han reaccioanado a la propuesta diligentemente, sin representantes díscolos o declaraciones altisonantes sobre la medida pergeñada por el Gobierno de Sánchez. Lo cierto es que, quieran o no, todos los edificios públicos del territorio leonés -Diputación, ayuntamientos y demás infraestructuras municipales- deberán implementar la nueva normativa en un periodo de siete días naturales, de forma que el próximo miércoles 10 de agosto ninguna casa consistorial de León podrá bajar el aire acondionado de los 27 grados o mantener su fachada iluminada más allás de las 22:00 horas.

Los responsables políticos de las administraciones leonesas asumen la nueva directriz con naturalidad, ya que, en su mayoría, ya se aplicaba buena parte de las medidas que ahora el Ejecutivo convierte en obligatorias. Por ejemplo, la Diputación de León, según explica el diputado socialista José Pellitero, «desde el inicio del mandato ya apostó por tomar medidas de ahorro energético, las cuales se han plasmado con la renovación de la iluminación en el interior de los edificos con luminarias led más eficientes». En el Palacio de los Guzmanes más del 80% de luces son led, incluyendo también numerosos sensores de presencia en puntos donde la presencia del personal no es constante, como pueden ser los servicios y otras estancias.

Hace poco la Diputación se vio obligada a solicitar una previsión de crédito de medio millón de euros para hacer frente a la factura eléctrica, para la cual se habían presupuestado 900.000 euros para el presente curso, pero finalmente el gasto ascenderá a 1,4 millones por el incremento de la factura eléctrica.

En lo que respecta a la iluminación de la fachada, Pellitero afirma que desde este el pasado martes se apagan las luces que decoraban el frontispicio del Palacio de los Guzmanes. Una medida que se espera que se extienda también a los monumentos y estatuas dependientes del organismo provincial.

En el interior de las dependencias provinciales solo hay media docena de despachos que disponen de servicio de aire acondicionado. El diputado José Pellitero precisa que adecuar la temperatura acorde a la norma será sencillo, toda vez que muchos de estos aparatos «están apagados la mayoría del tiempo». Por otro lado, la Diputación indica que ya se estaba trabajando en la regulación de la calefacción por zonas y plantas con sistemas de control remoto.

Los principales consistorios de la región leonesa, León y Ponferrada, ambos gobernados por el Partido Socialista, tambiñen han mostrado su aquiescencia respecto a las medidas de ahorro energético.

El Ayuntamiento de León ha encargado un informe al departamento de Prevención de Riesgos Laborales para dar cumplimiento al real decreto publicado el pasado martes en el Boletín Oficial del Estado (BOE).

Más vehemente se muestra el alcalde de Ponferrada, Olegario Ramón, el cual afirmó que los edificios municipales «se adaptarán a la medida antes de su entrada en vigor». Ramón declaró que «no son medidas graves o difíciles para la población en comparación con las que tendrán que tomar en otros países de Europa». En este mismo sentido, Ramón precisó que estas directrices responden ante «una situación europea y mundial muy difícil que nos obliga a todos a reducir gastos energéticos».

En lo que respecta a otra de las principales entidades locales de la provincia, el Ayuntamiento de San Andrés del Rabanedo, el ahorro energético será una mera continuación de procesos que ya se vienen aplicando desde hace unos años. Fuentes municipales destacan que, más allá de las limitaciones en la calefacción y el aire acondicionado, el resto de medidas ya estaban siendo aplicadas. La fachada del Ayuntamiento de San Andrés permanece sin iluminación desde las tres de la tarde, cuando el edificio queda cerrado tras su actividad matinal.