La ULE abre un expediente para investigar y sancionar a los residentes del Colegio Mayor San Isidoro

Con este informe policial, en el que se identifica a todos los participantes, que se encuentran en edades que abarcan entre los 18 y los 23 años, desde la ULE han asegurado que se ha abierto un expediente informativo, donde se valorará además la versión de los alumnos y de los responsables del centro antes de tomar una decisión sobre la sanción que acarreará esta celebración que ha tenido un impacto a nivel nacional.

«Nos hemos reunido con los estudiantes durante más de cuatro horas el propio viernes y durante cinco horas el sábado. Estamos recopilando toda la información para estudiar que medidas se pueden tomar a raíz de esto. No es algo que se pueda realizar de un día para otro, hay que estudiar bien cuál debe ser la sanción», ha explicado Ana Isabel García, vicerrectora responsable de este centro, que ha asegurado que será un castigo ejemplar: «Será un precedente para que quede claro que no se van a tolerar estos comportamientos».

García ha garantizado que la instalación, que depende de la Universidad de León, «tiene un protocolo bien elaborado», pero que «fueron los alumnos los que lo incumplieron». Y es que, poniendo de ejemplo lo que ocurre en el día a día de León en las calles, la responsable ha explicado que «sin responsabilidad individual los protocolos no sirven para nada», de hecho, recuerda «aunque no lo disculpo», que esta situación «se esta viviendo en muchos sitios».

«No podemos estar detrás de ellos todo el día. No vamos a poner un guardia por cada residente para que revise si cumple o no. Si de forma personal no hay responsabilidad es imposible aplicar un protocolo», valora García, que ha indicado que ni el conserje ni ninguno de los profesores fue consciente de lo que ocurría: «Nadie se enteró. Hay un subdirector y un jefe de estudios que viven allí, pero además de eso tienen su trabajo, no estaban allí».

De momento los 52 usuarios del Colegio Mayor San Isidoro se encuentran confinados en sus habitaciones, a la espera de una prueba PCR que se realizará este jueves, mientras que los 17 trabajadores de la residencia, incluida la vicerrectora debido a su contacto en las reuniones mantenidas con los responsables de la fiesta, ya se han realizado la prueba y están a la espera de su resultado.