Apenas 1.500 personas se manifiestan a favor de la Constitución en Barcelona

Muy poca gente porque el clima entre los partidos es de profunda división. De entrada, la marcha ya contaba con dos ausencias significativas: ni Sociedad Civil Catalana ni el PSC habían anunciado su presencia. Los socialistas, en plenas negociaciones con Esquerra, querían evitar imágenes incómodas junto a miembros de Vox. A última hora se desmarcó también Ciudadanos. La formación naranja, que había confirmado su participación con Lorena Roldán, se ausentó poco antes de que arrancara la marcha en la Via Laietana, a la altura de la plaza Urquinaona, el epicentro de las algaradas independentistas de hace un mes, por la presencia de una gran pancarta que pedía la derogación de la ley de violencia de género.

Una pancarta que ya daba pistas de que Vox era la formación que llevaba la voz cantante en el acto. «Desde Ciudadanos consideramos que hoy es un día de celebración y conmemoración de los valores de la Constitución española y no cabe hacer proclamas que cuestionan la lucha contra una de las peores lacras de nuestra sociedad», según apuntó la formación liberal en un comunicado.

Ninguno de sus representantes participó en la marcha. Tras la debacle electoral del 10-N, Ciudadanos, al menos en Cataluña, empezó este viernes a distanciarse de sus hasta ahora socios de gobierno en algunas autonomías, PP y sobre todo Vox. El constitucionalismo exhibió una cierta unidad en las grandes manifestaciones en plena efervescencia del 'procés', pero con el tiempo esa unidad se ha visto que era más bien coyuntural. Hace dos meses, por ejemplo, el PSC no apoyó la moción impulsada por Ciudadanos contra Quim Torra. El PSC se siente ahora más cómodo con los Comunes, mientras el PSOE trata de seducir a Esquerra para la investidura de Sánchez.

Con la ausencia de Ciudadanos y el PSC, además de SCC, que se manifestó por su cuenta en Girona y en Tarragona, también con escaso éxito de público, el protagonismo absoluto de la manifestación se lo llevó el presidente de Vox, Santiago Abascal, que prefirió celebrar la Constitución en Barcelona antes que en el Congreso de los Diputados, como el resto de líderes de formaciones de ámbito estatal. El líder de la ultraderecha, que fue recibido al grito de «presidente, presidente» en la plaza Urquinaona, cargó contra los dirigentes secesionistas que, a su juicio, son «golpistas» y contra quienes no juraron la Constitución el martes pasado, a quienes avisó de que llevará ante la justicia. «Vox será una muralla contra los que quieren romper la unidad nacional», advirtió.

Abascal justificó por qué prefirió ir al acto de Barcelona y no al de Madrid. «Me siento mucho más a gusto junto a tanta gente que lo está pasando mal y que ve el futuro con incertidumbre» que al lado del PSOE, aseguró. Junto a Abascal, marchó en la cabecera de la manifestación el presidente del PP en Cataluña, Alejandro Férnández, que afirmó que «ante una situación política inestable, la solución estará siempre dentro de la Constitución, nunca fuera». «Estamos aquí para reivindicar nuestra Constitución, que nos ha garantizado los mejores 40 años de nuestra historia», dijo.

Los lemas contra Torra y Puigdemont marcaron la marcha convocada por Espanya i Catalans y una cincuentena de asociaciones agrupadas en Cataluña Suma por España.