Calvo pide a Iglesias que deje de presionar con los indultos

Dos relevantes dirigentes de la formación morada, el portavoz en el Congreso, Pablo Echenique, y el presidente del grupo parlamentario, Jaume Asens, han reclamado este semana al Gobierno que acelere los trámites de los indultos y los conceda antes de las elecciones catalanas del 14 de febrero. Unas prisas que causaron malestar en la Moncloa, donde van con pies de plomo en este asunto por el coste político que puede acarrear. Una resolución favorable desataría un incendio en la oposición, y una negativa podría volar los frágiles puentes con los soberanistas.

Calvo reprochó a Unidas Podemos que levante la voz para reclamar unos indultos exprés en una estrategia de «precampaña» electoral impropia de un partido que se sienta en el Consejo de Ministros que debe decidir sobre la medida de gracia. El momento de resolver sobre la medida de gracia, afirmó la número dos del Ejecutivo en RNE, «llegará cuando llegue y cuando toque».

El Gobierno, prosiguió, no se fija para tomar una decisión de ese tipo «con qué coincide o deja de coincidir». El indulto antes de las elecciones catalanas de febrero es una exigencia unánime de las fuerzas independentistas a la que se ha sumado Unidas Podemos. La resolución del Supremo de revocar el tercer grado a los presos del 'procés' ha reforzado las peticiones de Esquerra y JxCat, pero desde el Gobierno aseguran que no van a acelerar sus planes por más que los republicanos y el PDeCAT reclamen un gesto por su apoyo a los Presupuestos y por el giro posibilista que han imprimido a su estrategia.

El Ministerio de Justicia inició el pasado octubre los trámites y ha pedido informes a la Fiscalía y al Supremo como tribunal sentenciador. Unos dictámenes que aún no han llegado al Gobierno, y que aunque no son vinculantes, suelen ser determinantes en la decisión del Consejo de Ministros. Los trámites, según fuentes de Justicia, duran entre cuatro y cinco meses, lo que sitúa en la próxima primavera el momento de tomar la decisión.

Pero el líder de la oposición se malicia que la decisión del Supremo de anular el tercer grado a los presos del 'procés' ha sido una mala noticia para Pedro Sánchez y que buscará la forma de aliviar la situación penal de los condenados a corto plazo, ya sea con indultos o con una reforma del delito de sedición en el Código Penal. Pablo Casado instó al presidente del Gobierno a no caer en la tentación de «sortear las decisiones de un tribunal que es garante, no solo de la ley, sino de la propia democracia».

Los populares creen que una de las cláusulas secretas del acuerdo presupuestario del Gobierno con Esquerra incluye la excarcelación de los independentistas condenados.

Una vinculación que en el PSOE niegan con vehemencia y descartan que la resolución del Supremo vaya a afectar a las relaciones con Esquerra. «El tribunal es el tribunal, el Gobierno es el Gobierno y el Partido Socialista es el Partido Socialista, no tiene nada que ver», afirmó este viernes el ministro José Luis Ábalos.