El TSJ desestima el recurso del asesino del universitario de La Torre en León

El Tribunal Superior de Justicia de Castilla y León ha rechazado de forma tajante los pretextos esgrimidos por el abogado del asesino de Mario Fuentes ante el recurso presentado contra la sentencia de la Audiencia Provincial de León.

Jorge Cervantes fue condenado por un delito de asesinato cometido en mayo de 2021, durante un botellón que se estaba celebrando en el entorno del pabellón de La Torre, en León. En el mismo se dirigió al joven universitario Mario Fuentes y le asestó una puñalada mortal tras perseguirle y sin posibilidad de que el estudiante pudiera defenderse.

El abogado solicitaba de nuevo la libre absolución de su cliente o una serie de atenuantes en base a nueve motivos de réplica que se han revisado en el TSJ.

El principal punto de su alegato es la vulneración de derechos fundamentales por infracción del derecho al juez predeterminado por ley al ser «competencia del tribunal del jurado» todos los delitos a enjuiciar en la causa. Con ello reclama que se enjuicien todas las lesiones sufridas por otros jóvenes presentes en el entorno del pabellón de La Torre aquella noche. El letrado insiste en que la intención de su cliente fue «lesionar a Mario, no matarle», en contra de lo que concluso por unanimidad el jurado popular. Aquí apunta a la vulneración del derecho a la presunción de inocencia porque su condena «carece de toda base razonable» y rechaza la calificación de los hechos y la concurrencia de alevosía para situar el delito en el grado de asesinato.

Todas estas cuestiones han sido rechazados por el TSJ y ya solo queda como posible vía apelar ante el Tribunal Supremo.

El magistrado José Luis Chamorro consideró en su momento «proporcionada» la pena de 18 años de cárcel debido a la «fiereza» que mostró el agresor en la persecución y el ataque con una navaja de 16 centímetros de hoja que provocó una herida mortal de necesidad y un resultado fatal «en una persona tan joven».

En virtud del Veredicto de culpabilidad emitido por el Tribunal del Jurado, el magistrado condenó a Jorge Cervantes Bello como autor de un delito de asesinato consumado en la persona de Mario Fuentes Gutiérrez, sin la concurrencia de circunstancias modificativas de la responsabilidad criminal al que se impone la pena de 18 años de prisión con la accesoria de inhabilitación absoluta durante el tiempo de la condena.

Asimismo, se impuso la prohibición de aproximarse a los padres y hermano de Mario Fuentes a su domicilio, lugar de trabajo o estudio a una distancia no inferior a 500 metros, así como la prohibición de comunicarse con ellos por cualquier medio, oral, escrito, visual, informático o telemático, a través de redes sociales o de mensajería instantánea y ello por tiempo de 20 años.

En concepto de responsabilidad civil deberá indemnizar a los padres de Mario Fuentes con 89.000 euros para cada uno de ellos y al hermano con 32.000 euros.

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