La presión empresarial, social y política lleva a Renfe a mantener su apuesta en el AVE

El planteamiento de Renfe, según fuentes internas de absoluta solvencia, era la eliminación de los AVE en la línea de León destinando sus activos logísticos a las líneas de bajo coste (los nuevos trenes 'avlo').

Esa determinación, real según se filtró el pasado sábado desde el seno de la propia compañía, suponía para León renunciar a la efectividad de una de las infraestructuras de mayor valor en la actualidad, considerada clave para el desarrollo industrial, empresarial y turístico a nivel provincial.

De ahí que la respuesta haya resultado contundente. En apenas unas horas PSOE, PP y UPL se unieron en un mensaje único: «no se puede tolerar la pérdida de la alta velocidad en León».

Para los socialistas la situación, por momentos, resultó de lo más inquietante. Sin conocimiento premio y en jornadas festivas el secretario general del PSOE en León solicitó reuniones de urgencia con el ministro de Fomento y la dirección de Renfe, pero las reuniones se aplazaron hasta este mismo lunes. En medio, una intensa presión por evitar «algo salvaje» para la provincia de León.

Pero la presión política solo ha sido uno de los frentes en los que se ha trabajado en las últimas horas. En silencio uno de los 'bloques' más activos y efectivos ha sido el de las Cámaras de Comercio de León, Asturias, Astorga, Palencia y Valladolid.

Fue el pasado sábado cuando miembros camerales tuvieron conocimiento de la situación. La información que estuvo en su mano era directa de la compañía ferroviaria y no ofrecía dudas: «Nos quedamos sin AVE».

Sin ruido externo los órganos camerales se citaron para este mismo lunes pero por el medio no fueron pocos los mensajes que hicieron llegar a los representantes del Gobierno y el propio PSOE tanto por la gravedad de la situación como por la necesidad de una respuesta urgente y cierta que permitiera garantizar la continuidad de los servicios AVE en la provincia y en la Comunidad. Su comunicado conjunto no ofrecía dudas al respecto.

Determinante resultó la intervención de las Cámaras de Comercio como de los representantes empresariales. Federación Leonesa de Empresarios (Fele) y Círculo Empresarial Leonés (CEL) se unieron en su reivindicación. «Rechazamos cualquier recorte en la alta velocidad para León y exigimos no solo que no se limiten las frecuencias sino que éstas se incrementen en beneficio de la actividad económica en la provincia», aseguró Javier Cepedano.

«Mostramos la más absoluta indignación por una decisión unilateral y tremendamente injusta con la provincia a la que condenan repetidamente a seguir en el furgón de cola del desarrollo, en este caso en las comunicaciones y transporte ferroviario con la capital de España, y a los leoneses a ser ciudadanos de tercera», remarcó con enorme contundencia Julio César Álvarez.

A esas voces se unió el sector hostelero y de la mano miles de leoneses a través de las redes sociales.

Para el PSOE leonés el asunto tomó un cariz capital hasta el punto de mantener una reunión directa con el ministro de Fomento este mismo martes que se extenderá a un encuentro con la presidencia de Renfe el próximo jueves.

El objetivo es reafirmar la apuesta de la compañía con el AVE a León y evitar que en los planes de la operadora puedan volver a plantearse estrategias que conlleven la eliminación o reducción de las prestaciones de 'alta velocidad' en la zona norte.

De momento, Renfe se ha comprometido mantener los actuales servicios AVE y recuperar la venta de billetes para este servicio a partir del día 20.