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El grupo municipal del Partido Popular en el Ayuntamiento de León presenta los resultados de la auditoría que han realizado tras visitar los 18 centros educativos públicos de infantil y primaria de la ciudad de León donde estudian cerca de 4.000 alumnos. Tras hablar con los equipos directivos y las asociaciones de madres y padres, los populares detectan tres problemas fundamentales que se repiten en «todos» los centros.
En primer lugar y según expuso este jueves 24 de octubre el portavoz popular en el consistorio, David Fernández, los colegios acusan una «burocracia excesiva» que se complica por la «falta de comunicación rápida y clara» con el Ayuntamiento. También denuncian una falta de mantenimiento generalizada con «desconchones, suciedad y problemas con la pintura»así como una «limpieza deficitaria» que se solucionaría con la contratación de más personal.
Al tiempo, los populares detectan otros dos problemas que comparten tres cuartas partes de los centros: el mal estado de los baños y los problemas en los patios con «baches y maleza». A estas deficiencias suman otras como «problemas con las calderas, mala iluminación, falta de limpieza en canalones que deriva en goteras y grietas o el mal estado de los gimnasios».
En el foco de las críticas el alcalde de la ciudad, José Antonio Diez, a quien Fernández acusa de «mantener los colegios en una situación de precariedad» que, dice, bien responde «a una dejación de funciones o a que no le importa». Se remonta a mayo 2019, cuando Diez era candidato al consistorio, para recordar que una de sus promesas fue «hacer un plan de mantenimiento específico para los colegios y crear un banco de sugerencias». Ambas, a día de hoy «no se han cumplido», y los populares cifran la inversión en mantenimiento de los centros, «competencia exclusiva de los ayuntamientos» en 790.000 euros en tres años. Además, acusa a Diez de incluir a los 18 colegios en la partida conjunta de mantenimiento de edificios municipales que suma 118.
Exponen los populares que, a pesar de las palabras de Diez este pasado miércoles cuando presentaba en el Coto Escolar su proyecto para los centros educativos donde pedía «diálogo a la Junta», la realidad es que «no nos consta que en cinco años haya ni una sola petición de reunión con la consejera de Educación».
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Tras la auditoría, el grupo popular exige a Diez una actuación «de inmediato» que cifran en cuatro puntos. En primer lugar, piden que «cumpla sus competencias». En segundo, que cree un «canal de comunicación eficaz con los centros». Siguen exigiendo que se ponga en marcha, como rezaba el programa electoral, el plan de mantenimiento y el banco. Por último, y a las puertas de la aprobación de los presupuestos municipales para el próximo ejercicio, solicitan a Diez que tenga en cuanta su propuesta de poner en marcha un plan de choque dotado con dos millones de euros en dos años para subsanar las deficiencias de los centros educativos públicos.
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