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Con la mirada puesta en el medio plazo, esto es en la celebración del congreso provincial, el PP de León se abre a nuevas batallas internas que evidencian su actual estado de descomposición.
El mismo PP que presumía con Isabel Carrasco ... de contar con 12.000 militantes, en su mayoría afiliados que fueron incluidos en las listas de forma interesada para reforzar la figura de su entonces presidenta, medita ahora qué hacer para rearmarse a nivel interno y recuperar el peso específico perdido.
El PP leonés nunca tuvo aquella ingente cantidad de militantes, ni de lejos, pero sí mantenía un férreo control interno que se ha evaporado tras abandonar Eduardo Fernández el máximo cargo orgánico a nivel provincial.
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La 'refundación' del partido pasaba, hasta hace unos días, por una apuesta de regeneración, que evitara continuar con el actual estado de descomposición interna dando entrada a 'savia nueva' llegada desde las nuevas generaciones del partido.
En esa línea el actual senador popular Javier Santiago Vélez ha ido tejiendo desde hace meses una amplia red de avales que permitan su acceso a la presidencia provincial. Hoy, su respaldo en las bases (que apenas superan los 1.600 militantes reales) resulta notable.
El PP leonés, sin embargo, ha evidenciado de nuevo su desestructurado estado abriendo en las últimas horas una 'tercera vía' de la mano del actual alcalde de la localidad leonesa de Villaquilambre, Manuel García.
La polémica
J. Calvo | J.L. Barrio
Su aparición en la primera línea del escenario, según fuentes populares, evidencia otro drama interno en la formación popular: la reapertura de la puerta al diputado que dimitió tras falsificar el título de Derecho.
Los estrechos lazos que unen a José Miguel González Robles y el actual alcalde de Villaquilambre, Manuel García, y las relaciones del primero con Génova a través de Teodoro García Egea (el número dos del PP fue quien respaldó al autor de la falsificación) evidencian la situación del Partido Popular en León.
González Robles y Manuel García están unidos no solo por lo político, también por lo económico. Fue el Ayuntamiento de Villaquilambre quien de forma reiterada contrató a artistas representados por el político que falsificó su título de derecho.
La oposición ya puso en su día la mirada en aquellos contratos que ahora quedan de nuevo bajo la lupa.
Robles podría ser de este modo el 'trampolín' de Manuel García de León hacia Génova. La duda creciente hoy es si ese trampolín servirá para hacerse con el PP leonés y si ese paso no conllevará la descomposición total de los populares en la provincia.
El que fuera secretario general del PP de León y diputado electo por León, José Miguel González Robles, presentó en noviembre de 2019 su «dimisión irrevocable» de ambos cargos después de que admitiera que el título de licenciado de Derecho incluido en su curriculum oficial del partido no era correcto al no haber concluido el grado.
El dimisionario aportó entonces un título falso de la Universidad Complutense, algo de lo que culpó a una empresa externa. Gonzáles Robles, tras revelar leonoticias lo sucedido, achacó también esta situación a problemas con las convalidaciones de asignaturas que, según indicó entonces, cursó en Colombia.
Aupado como número dos del PP de Léon por Teodoro García Egea, para él y para su entorno no había duda: tenía esa titulación universitaria. Sin embargo, una vez que las dudas sobre su validez se hicieron públicas, González Robles aseguró entonces en tono exculpatorio que «quizá me la han jugado porque todo esto era algo que llevaba una empresa a la que le facilité las asignaturas cursadas y fue esa empresa la que me facilitó el título».
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