El 65% de LAJ sigue la huelga en León que podría paralizar el juicio de la Hullera previsto para febrero

En el caso de la provincia de León, el seguimiento de la huelga ha ascendido al 65 por ciento durante esta jornada, un 81% en el conjunto de España, sobre las personas que realmente podían hacerla descontando los servicios mínimos.

Uno de esos juicios que podrían paralizarse es el de la Hullera. Como recuerda el presidente del Colegio de la Abogacía de León, Fernando Santocildes, una nueva suspensión de este juicio que ya acumula diez años de retraso sería «desagradable y en perjuicio de los ciudadanos y profesionales» aunque reconoce el derecho de los trabajadores «a la huelga y a reivindicar lo que consideren legítimo».

Junto a este decenas de juicios y vistas se podrán ver afectados ante una huelga que no se sabe cúando concluirá y cuyas posturas entre Ministerio y asociaciones se encuentran muy alejadas.

Así lo evidenciaba el cruce de acusaciones que el lunes enfrentaba a los tres asociaciones convocantes del paro y el secretario de Estado de Justicia, Antonio 'Tontxu' Rodríguez, del que pedían el cese por asegurar que la huelga «es política, sin finalidad profesional alguna y contra el pueblo».

En un comunicado conjunto, las tres asociaciones que han impulsado la huelga de los Letrados de la Administración de Justicia han asegurado que «si el Ministerio de Justicia quiere que la solución con este conflicto colectivo se alcance en algún momento, ello comportará indefectiblemente la necesidad de cesar al secretario de Estado».

La UPSJ, la AinLAJ y el Colegio Nacional de Letrados han recalcado que las declaraciones de Rodríguez les ratifican «moral y profesionalmente» en su intención de «reclamar hasta las últimas consecuencias una adecuación salarial justa», así como «un marco de representación independiente y propio, en el que la relación con los poderes institucionales sea netamente bilateral».

Los Letrados de la Administración de Justicia comenzarán este martes una huelga indefinida, con el consecuente «riesgo de paralización» de los juzgados y tribunales de todo el país, en demanda de una mejora salarial equivalente al aumento de la carga de trabajo que sufrieron hace años sin que entonces se les compensara.

El parón 'sine die' es el resultado del conflicto laboral que mantienen desde hace meses con Justicia y que les ha llevado a protagonizar ya huelgas puntuales -que obligaron a suspender juicios y declaraciones, incluidas algunas del conocido como 'caso Villarejo' en la Audiencia Nacional- y concentraciones.