CCOO lanza un «ultimátum» a los políticos antes de convocar una huelga general en León

El secretario general de Comisiones Obreras Industria de León, Ángel Santos, y su homólogo en Castilla y León, Gonzalo Díez, han analizado la situación que atraviesa una provincia que «sangra y es golpeada», con empresas que cierran y ausencia de «voluntad política y de las administraciones» para ponerle remedio.

Esa es la radiografía que ha presentado el sindicato, quien ha querido lanzar un «ultimátum» antes de convocar una huelga general de carácter provincial. «Hemos iniciado un proceso sostenido y creciente para agitar la provincia y salir a la calle porque la situación lo requiere. Si la ciudadanía está preparada y sigue sin haber voluntad política, convocaremos una huelga general», ha sentenciado Santos.

En un amplio informe de la situación que ha atravesado León en materia industrial en el último año, el sindicalista ha abordado los problemas vividos en cuatro grandes empresas de la provincia.

El resultado más satisfactorio se vivió en Aceros Roldán, donde se convocó una huelga indefinida para exigir una prima única para todos los trabajadores y tras 15 días de parón se logró resolver.

También se valora de forma positiva la resolución del conflicto con LM, para la que se planteó una reestructuración de 393 puestos y de las condiciones laborales, poniéndose en peligro incluso la permanencia de la industria en El Bierzo. «Logramos poner toda la maquinaria a funcionar, incluido la movilización de la Junta y el Gobierno, hasta conseguir mantener la empresa», afirman desde CCOO.

Peor han ido las cosas con Jupiter Bach, que deja un sabor «agridulce» entre la aprobación de los trabajadores, que lograron buenas condiciones, la bolsa de empleo y su recolocación; pero no se consiguió mantener el trabajo y la factoría cerrará el 31 de diciembre. Aquí se ha interpelado a Ana Carlota Amigo, quien se comprometió a crear una comisión de seguimiento de la que el sindicato aún no sabe nada.

Mientras que el conflicto de Laboratorios Ovejero sigue abierto, con «la avaricia del empresario» echando por tierra los avances logrados.

El secretario de Industria en Castilla y León de Comisiones Obreras, Gonzalo ´Díez, se ha dirigido a la patronal para denunciar su posición «intransigente» que no deja avanzar en los convenios colectivos de panaderías, gases licuados o la vid, así como el siderometalúrgico que afecta a 12.000 trabajadores y 1.500 empresas en la provincia para el cual, si no hay avances, «el conflicto está servido».

«Si la patronal ofrece salarios bajos para la provincia como estrategia, se está equivocando. Ese no es el camino que se aplica en otras provincias y así se acabará yendo la gente a trabajar fuera», matizan los sindicalistas.

Entre los acuerdos que sí han logrado resolver se encuentra el convenio de forestales -que afecta a 4.000 trabajadores en Castilla y León- o el preacuerdo con las cárnicas -con 1.500 empleos en la provincia, un 30% del agroalimentario-.

Sobre el seguimiento del convenio para la transición justa en las cuencas mineras, CCOO ha protestado por los retrasos de este plan que permitirá recolocar a 188 trabajadores, muchos de ellos en Fabero, Villablino y La Robla; así como de la lentitud para resolver el plan de restauración ambiental, que en el caso de la provincia estarían ubicados en la Gran Corta de Fabero, en Casares de Arbas y en Torre del Bierzo. «Serán a través de Tragsa y en los tres años que dure, que esperemos sea cuanto antes, se cree trabajo para los excedentes de la minería o trabajadores parados de esas zonas, así como que doten a las cuencas de alternativas». También se viven con retraso los proyectos en infraestructuras como el polígono de La Robla ao el colector de Villablino.