La acusada que grabó el vídeo de la brutal agresión del Húmedo insiste en que la víctima «apuñaló a un menor» previamente

La primera carga de prueba presentada por el fiscal ha sido el vídeo emitido por leonoticias en el que se pueden ver unas imágenes de alto contenido violento en el que varias personas agreden a Víctor, y en el que una mujer grita «hasta matarle» detrás de la cámara que está grabando.

La primera de las acusadas, la persona desde el terminal que se acaban difundiendo las imágenes, ha rechazado que fuera ella quien «le deseara la muerte» a la víctima durante la paliza.

Del mismo modo, narró que fue el agredido quien empezó la discusión en un pub de San Martín. «Víctor apuñaló a un amigo mío en el 'Pecatto'». Allí, previamente, la víctima se acercó a ella y le comentó que «qué hacía con mi amigo, que era negro y yo era nazi».

En ese momento, según relata, su amigo entró a defenderla y el agredido «le apuñaló. En ese momento todo el mundo se volvió loco y fueron detrás de él porque había apuñalado a un menor».

La joven acusada aseguró que el motivo de grabar las imágenes fue «para identificar a los agresores», a los que asegura no conocer «porque las imágenes no se ven bien». De hecho, insistió en que el que «lleva años detrás de mí es Víctor -víctima- por ser la hermana de Dani -reconocido afín a la extrema derecha-».

También se defendió de las acusaciones de pertenecer a una banda de extrema derecha y aseguró que uno de sus mejores amigos «es de color negro».

El fiscal solicita una pena de cinco años de prisión para cada uno de los tres acusados, pena que aumenta en el caso de la acusación particular al considerar que hay intento de homicidio.

Los otros dos acusados también justificaron su comportamiento durante la noche de autos. La mujer a la que se le oye gritar «hasta que lo matéis» ha asegurado que estas palabras están «sacadas de contexto» y que ella nunca había vivido antes «una agresión tan brutal». «Estaba muy asustada y no pienso nada de eso. Solo pedí que pararan ya y dije que lo iban a matar», relató en sede judicial. Ésta se desvinculó de cualquier ideología, declarándose «apolítica», rechazando que la otra de las acusadas tuviera alguna significación política. Del mismo modo, comentó que fue el propio herido, Víctor, quien poseía una navaja «que movía con gestos a diestro y siniestro» mientras ella solo pedía «que pararan ya porque lo iban a matar».

Por su parte, el único varón acusado, afirmó que la víctima «escupió» a una de las encausadas y «luego apuñaló» al novio de ésta. Se desmarcó de la persecución a Víctor por las calles del Húmedo, justificando que sufre una lesión de rodilla, y descartó que las otras dos acusadas tuvieran ideología de ultra derecha.