Crimen de Cembranos

La acusada fue amenazada para confesar: «Tú quieta ahí; como intentes moverte, la próxima eres tú»

La acusada, F.R.V., reconoce dos agresiones a la víctima, pero mantiene que «yo también me quería ir de la casa». La última jornada del juicio ha contado con las declaraciones de los dos acusados en el caso del crimen de una prostituta de 20 años en la localidad leonesa de Cembranos.

La primera en declarar ha sido la mujer que ha relatado los hechos ante las preguntas del Ministerio Fiscal. La acusada recuerda como «estábamos en el club consumiendo cocaína y alcohol por el cumpleaños de una chica y queríamos salir de fiesta». En ese momento, ella pensó en el acusado y le ofreció «un trío» para que las llevase de fiesta, aunque en otras ocasiones «había sido él quien me pidió el trío». Ya en la vivienda «empezamos a consumir y a tener relaciones», cuando el acusado les dijo que «si íbamos a consumir más teníamos que pagar» y ante esa proposición «nos quisimos marchar y no nos dejó».

Según la declaración de la acusada, fue en ese momento cuando se complicaron las cosas ya que la víctima «le llamó 'hijo de puta' y él se ofendió mucho». La joven relata que «MM.G.R. se sentó en la cama y me dijo: 'Yo soy un señor y esta chica me está faltando al respeto en mi propia casa. Además mi madre ha fallecido hace poco y esto me duele'». Como la víctima seguía insistiendo en insultar al acusado intervino la otra acusada que «la golpeé en la boca para que se callase». Mientras la acusada, arrodillada, pedía perdón al acusado la víctima intenta escapar, momento en el que suena la alarma de la vivienda.

Esa situación se produjo en torno a las 10:30 horas de la mañana -cuando salta la alarma- pero la acusada no sabe precisar qué pasó hasta que se fueron al taller. Ahí lo hicieron con la promesa de volver al club. «Luego nos dice 'nos vamos' y que nos iba a llevar al club», relata la acusada, aunque luego «paramos en un taller».

En ese momento, la víctima empezó a decir «este hijo de puta como tarda» y ahí volvieron a discutir y la acusada «bajé del coche y le di un puñetazo».

Ya camino del club en el coche la víctima coge el teléfono y el acusado le pregunta con quién habla, pero ella responde insultándole de nuevo lo que hace enfurecer a MM.G.R.que dice: «Ahora si te has pasado, ahora si que te mato».

En el relato de la acusada recuerda que «ahí dio la vuelta a la casa, yo me puse nerviosa de la situación y me pasé para atrás y la pegué: 'Ves, por tu culpa. Te lo dije'». Cuando llegaron a la vivienda «puso la música» y «me dijo que fuera para dentro y sacó a la fuerza a Y y la dijo: 'Ahora te vas a enterar de lo hijo de puta que puedo ser'».

La acusada relata los hechos en la vivienda, aunque en muchos momentos insiste en que «no lo estaba viendo, yo no estaba ahí». Entre lo que relata en la declaración en la Audiencia Provincial de León recuerda que «él la empuja al suelo y me dice a mí que me vaya a la otra habitación». Según el relato de F.V.R. «se pone encima de ella y la envuelve con la cinta y me grita para que le dé otra cinta». La acusada insiste en que ella no participó en este proceso, pero estaba amenazada y tenía miedo por su familia, con lo que le obedeció. «'Tú quieta ahí, como intentes moverte la próxima eres tú. Esto no es nada para mi', dijo M. como diciendo que no era la primera vez que lo hacía», relata la acusada.

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