Rajoy reivindica la «moderación» del PP frente «a una panda de amiguetes que se juntan y forman un partido»

Rajoy aseguraba que en Castilla y León «quieren un Gobierno que se tome las cosas en serio, diga lo que va a hacer y goce del respeto de los ciudadanos aunque no lo hayan votado». Y todo ello, lo cumple la figura de Alfonso Fernández Mañueco.

Mariano Rajoy, que se autodefinió como «hincha del PP», destacó del partido que «forma parte de Europa», allí donde «se juegan muchas cosas», entre las que hizo alusión a los fondos europeos, los tipos de interés, el control del gasto publico, la política energética y «otras muchas decisiones que cada vez afectan más en la vida cotidiana».

La intervención de Mariano Rajoy se iniciaba con una pregunta que él mismo se hacía «¿Que hago yo aquí?». Y al igual que se la formulaba, él mismo la respondía.

«En primer lugar a pediros que vayáis a votar y como os ha dicho vuestro presidente que 'si tu no votas otro lo hará por ti'», aseguró el expresidente, para continuar: «He venido a más cosas, he venido a pediros que votéis a Alfonso Fernández Mañueco que es el mejor de los candidatos a estas elecciones».

Pero no cesaban ahí sus motivos y aseguraba que «también he venido a deciros que votéis al PP, porque es el mío, es el vuestro y es el bueno». Y cuando los presentes comenzaban a no ocultar sus risas, Mariano Rajoy continuaba.

«También he venido a dar un paseo por León, que es un plan magnifico, porque es una ciudad que no deja indiferente a nadie».

Un acto en el que Mariano Rajoy calificó de «broma» el debate del Ejecutivo central, al que acusó de «estar revisando la historia, hablando de Franco, la Constitución o la forma de Estado y Europa», en vez de «ocuparse de los problemas de la gente, del precio de la luz, o de la gasolina, o de la cesta de la compra, o de lo que ocurre con las materias primas o de que haya en España una inflación por encima del seis por ciento por primera vez en 30 años».

A esta a última, a la inflación, se refirió como «el impuesto más letal y el que más afecta a las personas con menos recursos» por culpa de un Gobierno que «hace anuncios que nunca se concretan en nada».

Un Gobierno conformado con partidos que «no quieren a España ni su Constitución, que no aceptan soberanía nacional y lo que digan los españoles, que apoyó a una organización terrorista y ahora habla por teléfono con un director general del Gobierno, que está apoyado por partidos anti empresas, anti liberales y anti España, en conflicto y discusión permanente».