Espiau desata la pasión en El Toralín

El técnico vasco puso sobre el terreno de juego a un once que los bercianos empiezan a repetir casi de memoria con una columna vertebral que le ha valido muchos puntos a la Deportiva.

Bolo decidió apostar por Amir en portería, Copete y Pascanu en el centro de la zaga junto a Adot y Ríos Reina en los laterales. En el centro del campo, nuevamente, Erik Morán junto al incombustible Agus Medina.

La principal novedad residía en los costados residía en la vuelta al once de Dani Ojeda. El canario ha logrado superar sus dolencias y volvía así al once de la Ponferradina. El equipo recuperaba la verticalidad y desborde de uno de sus principales activos en defensa. En la banda opuesta, Miguel Baeza se mantenía en el once.

En la punta de ataque, dos hombres que acumulaban hasta el inicio del choque 12 de los 31 goles cosechados por los bercianos.

La Deportiva firmó un primer tiempo sólido y solvente y logró contener a su rival. Un guion propicio para que los de Bolo lograran cimentar un triunfo para salir por fin del 'bache' de derrotas y mantenerse en los puestos de playoff.

Yuri avisó con un buena oportunidad. El delantero brasileño no llegó por poco a una prolongación de cabeza de Enrich tras un buen envío aéreo de Baeza.

La capacidad del delantero balear para encontrar espacios y tener en mente la posición de sus compañeros en el área es una de sus virtudes. La experiencia es un grado y el ex del Eibar lo demostró en una acción que fue determinante en el primer tiempo.

Enrich cazó un balón en el lateral del área chica, se revolvió de su marcador y, de espaldas al marco de Zubiaurre, encontró en la frontal a Erik Morán.

El centrocampista vasco no desperdició el regalo de su compañero y mandó el balón al fondo de la red con un disparo raso y ajustado, lejos del alcance del meta de la Real Sociedad 'B'.

El VAR le negó el gol a Yuri, que había logrado doblar la ventaja para los suyos con un tanto de bella factura. El veterano ariete recibió un balón en profundidad, recortó a su marcador y con un balón sutil y picado, superó al portero del conjunto donostiarra.

Por casi milímetros, el colegiado Gálvez Gascón le indicó al colegiado sobre el terreno de juego, García Verdura, que el hijo adoptivo del Bierzo se encontraba en posición antirreglamentaria.

Sin el premio de un segundo tanto, los jugadores enfilaron el camino de vestuarios tras un primer tiempo convincente para los locales, que dejaron sin apenas protagonismo a Karrikaburu y compañía.

La Ponferradina no pudo mantener su plácido dominio en una segunda mitad que, por momentos, fue un descalzaperros.

La Real Sociedad encontró el camino para llegar al empate con un penalti. El guardameta Amir midió mal en su salida y golpeó en la cara al debutante Gómez. Karrikaburu no perdonó y reestableció las tablas.

La suerte, sin embargo, también se alió con una Deportiva que, del mismo modo que su rival, se encontró con un regalo en foma de pena máxima. El defensa central Clemente fue el autor de la infracción después de que derribara a un contrario en su área.

Pese a las intentonas de Zubiaurre de despistar a Yuri , el delantero brasileño golpeó el esférico con determinación y superó al guardameta con un fuerte disparo a la derecha del marco de la Real Sociedad 'B'.

Poco duraría la alegría en El Bierzo porque González de Zárate todavía tenía una bala en la recámara. El vitoriano se inventó un pase filtrado que recibió Lobete. El atacante del filial donostiarra no perdonó y con un disparo cruzado batió por bajo a Amir.

La Deportiva se encontraba, de nuevo, sin los tres puntos tras un primer tiempo de dominio. Espiau, que había entrado al terreno de juego en reemplazo de Yuri, salvó los muebles.

El canario se situó en el primer palo para recibir una asistencia de París Adot que no desperdició. El ex de Las Palmas había marrado una buena oporunidad previamente, después de que no encontrara a Sergi Enrich cuando el balear se encontraba solo, en boca de gol. Los ánimos de Enrich después del fallo, con efusivos aplausos, motivó a su compañero.

Enrich se encargó del respaldo anímico y Adot puso una dosis extra de pundonor para marcarse una gran galopada para aparecer libre de marca por la derecha y asistir a un Espiau que se redimía en El Toralín tras perder la titularidad de la que gozaba al inicio del campeonato.

La Deportiva consigue una victoria balsámica. El equipo vuelve a la senda del triunfo tras dos derrotas ante Tenerife y Girona. El equipo vuelve a sumar de tres en tres en su estadio.

El Toralín debe ser un fortín si el equipo quiere aspirar a una clasificación histórica para playoff. Este lunes que cierra la jornada la grada empujó y el equipo se encargó de hacer el resto.