Stuani y el Girona alejan a la Deportiva de su sueño

En esta batalla sin cuartel por imponerse como la principal alternativa a los equipos con plaza, momentáneamente, en el playoff, el Girona quiso imponer su condición de local y su teórica etiqueta de favorito a estos puestos.

Los de Francisco impusieron su ley en los primeros minutos, con un Franquesa muy presente en el costado izquierdo albirrojo y con una Deportiva que, cuando tenía el balón, intentaba salir rápido, por las bandas, para sorprender a los catalanes.

En los primeros minutos hubo cierto equilibrio acompañado de un ritmo altísimo de partido, con constantes idas y venidas que favorecían a jugadores como Sylla o Pablo Valcarce. El senegalés, junto a Samu Sáiz, era el principal elemento de peligro de un Girona que, con el paso de los minutos, ejercía una mayor superioridad sobre los de Bolo.

Llegaron minutos en los que la Deportiva tuvo que ponerse el mono de trabajo, saber sufrir y defenderse. La superioridad gerundense era cada vez más clara y la Deportiva veía cada vez más lejos el marco defendido por Juan Carlos. Los balones largos buscando a Kaxe o Doncel no resultaban ser fructuosos y el conjunto berciano estaba encerrado en su campo.

Pese a todo, ese dominio catalán no se traducía en un goteo constante de ocasiones, pero sí en dos buenas oportunidades, especialmente una, la de Franquesa, tras un pase de gol de Sylla que dejó al carrilero con un remate a placer a portería vacía, pero el incomodo de Paris le impidió rematar con precisión y su disparo se fue alto. Poco después, Samu Sáiz lo intentó desde fuera del área, con un chut que se marchó por encima de la portería.

Superada la primera media hora de juego, los de Bolo se despojaron de ese dominio y el punto de inflexión fue una ocasión de Valcarce que, tras una jugada personal y casi sin ángulo, forzó el córner.

Fueron los mejores minutos de la Deportiva, en los que el Girona no lograba superar la medular con claridad y donde los ponferradinos acechaban un gol que casi logra Juergen. Una gran recuperación y salida de Paris acabó en el costado izquierdo, donde Moi Delgado puso un gran centro para el colombiano que, llegando desde atrás, cabeceó fuera en una posición franca.

Eran los mejores minutos de los de Bolo y parecía que el gol berciano podía llegar. Pero la situación fue totalmente opuesta. Y es que el Girona cuenta con uno de esos jugadores que tiene un pacto tácito con el gol como Stuani que, con una ocasión con cierta claridad, adelantó a su equipo. El uruguayo, en el área pequeña, recibió un balón de Samu Sáiz para anotar el 1-0 en la última jugada del primer periodo.

Ese gol hizo daño a la Deportiva y espoleó al Girona. Así se pudo percibir en el inicio de la segunda mitad, momento en el que los catalanes se mostraron, de nuevo, superiores a los de Bolo. Los blanquiazules tenían el ímpetu, pero no las ideas para superar a la defensa local, mientras que los de Francisco amenazaban con cada llegada.

En la primera ocasión clara de la segunda mitad, llegó el 2-0. Stuani y Samu Sáiz se intercambiaron los papeles del primer tanto y el uruguayo dejó un balón de cara para el mediapunta que, con un gran disparo desde la frontal, puso el balón lejos del alcance de Caro. Sáiz duplicaba la ventaja catalana con la mala fortuna de lesionarse en el golpeo.

Este segundo mazazo iba a ser difícil de superar para una Deportiva que, durante toda la temporada, había demostrado una gran fe y capacidad de competir en cualquier circunstancia. Buscó sacar ese espíritu Bolo con un triple cambio que renovara el equipo, pero el conjunto berciano siguió tocado por el marcador adverso.

Fue Yuri quien despertó a la Deportiva. Tras unos minutos de recuperación para los bercianos, el capitán ponferradino recibió un balón escorado y, cuando todos esperaban un centro, el brasileño soltó un latigazo con su pierna zurda que se estrelló en el poste de Juan Carlos.

Pero fue un simple espejismo, porque el Girona, viendo que Yuri podía levantar a los suyos, quería sentenciar. Y si el brasileño es un factor diferencial, también lo es Stuani, al que el larguero le privó de su particular doblete tras un gran centro de Franquesa, incombustible durante todo el partido, que el charrúa cabeceó al travesaño.

Eran unos minutos donde el Girona buscaba la sentencia del partido y la Deportiva agarrarse a un haz de esperanza. Stuani, de nuevo, la tuvo con un remate acrobático en el área que se fue alto. Los locales estaban perdonando al conjunto berciano, que buscaba algo más allá de una genialidad de Yuri a lo que agarrarse.

El Girona tuvo el mejor remedio contra una posible rebelión ponferradina. Bustos, que suplió a Stuani, anotó el tercero en el primer balón que tocó, para dejar el partido totalmente cerrado. Yuri, en el tiempo añadido, maquilló el marcador con un gran remate picado en un saque de esquina que no tuvo mayor trascendencia en el resultado final.

De esta manera, la Deportiva 'mete' en la lucha por el playoff a un rival directo como el Girona y pierde comba en esa ilusión de alcanzar la promoción de ascenso. Pese a todo, el conjunto berciano aún tiene nueve jornadas por delante para no dejar de soñar.