Unionistas cava la tumba de la Cultural en el Reino ante un equipo sin alma

Recuperó un esquema más reconocible el míster y tiró de los mejores jugadores en cada puesto para regresar a la senda de la victoria en el Reino de León. Sin embargo, en apenas nueve minutos se le caería la primera pieza del tablero con la lesión de Kawaya en su primer sprint.

Ya por entonces, la Cultural no había entrado bien en el partido. La presión en bloque medio de Unionistas ahogaba las intenciones de dominio de los leoneses, que tampoco salieron en tromba ante el cuadro charro.

Pronto llegaron las ocasiones. La primera fue para Iñigo Muñoz, que se sacó un potente disparo hacia la escuadra para que Zubiaurre soltara una mano salvadora y evitara el 0-1. Poco después, el larguero fue el encargado de evitar el 1-0, tras un chut lejano de Escardó que tocó en un jugador salmantino y se estrelló contra el palo superior de Serna.

Unionistas se fue haciendo con el control del juego y llegaron los peores momentos para los leoneses. Una sucesión de disparos de Lamadrid llevó al público al enfado y exigir más rendimiento a un equipo apático y sin ideas. De los pitidos se pasó a los ánimos y lo agradeció el conjunto blanco, que despertó tras estar cerca de caer a la lona.

Un centro de Sergio Marcos, y que rozó Bravo, lo tuvo que salvar Serna como pudo en un despeje y parada en dos tiempos. Y en el minuto 39, llegaría el tanto que devolvería las aguas a su cauce. Escardó chutó desde fuera del área y su balón fue buscando el palo contrario de la meta de Unionistas para acabar alojándose en el interior de la red. Era el 1-0 y la Cultural despertaba del letargo.

El premio, inmerecido hasta ese momento, pudo quedar en nada de no ser por otra intervención de Zubiaurre, a disparo de Muñoz, que salvaba la igualada antes de afrontar el camino a los vestuarios.

No se aculó la Cultural en la reanudación. Los de Idiákez querían presionar arriba y tener el balón. De hecho, en un segundo tiempo con muchas menos ocasiones, la primera fue para los locales. Escardó disparó de nuevo y el rechace de Serna el cayó a Dioni, quien vio cómo en el último instante se cruzaba Marín para salvar su remache a gol.

Todo cambió, y pudo ser aún peor, en el minuto 62. Rodas se equivocó y permitió una contra que condujo De la Nava. El jugador cedió en el interior del área para Hernández y éste fue derribado cuando iba a empujar el esférico a la portería, por lo que el colegiado no dudó y mostró la roja a Araújo y decretó la pena máxima. Al lanzamiento fue Iñigo Muñoz, que cogió carrerilla y chutó con fuerza para ver cómo el balón lo repelía el larguero de un Zubiaurre ya batido y los blancos mantenían su ventaja, aunque tendrían que afrontar media hora con un jugador menos.

Pero poco pudo aguantar la Cultural. En el minuto 73, una jugada muy bien trenzada por Unionistas les daría el premio que el larguero les negó. Iñigo Muñoz filtró un balón para Jon Rojo y éste hizo un pase de la muerte hacia Hernández, que aprovechó su ocasión y establecía el empate en el Reino.

Los leoneses se partieron tras encajar el tanto. La desventaja numérica provocaba que el balance defensivo fuera malo y el técnico Hernán Pérez olía sangre en el Reino de León. En una transición, los salmantinos encontraron huecos hasta que Álex Rey, libre de marca en la frontal del área, soltó el disparo para que Zubiaurre tirara de reflejos y evitara la remontada visitante.

Y fue en el tiempo de descuento cuando Unionistas cavó el hoyo de la tumba de la Cultural. Otra transición rápida acababa con un pase atrás hacia Marín, que encontró un tiro ajustado al palo al que no llegó el meta guipuzcoano y puso el 1-2 que hizo temblar los cimientos del Reino de León.

La afición estalló contra su equipo y contra Felipe Llamazares, el director general, que tuvo que escuchar los gritos contra su persona. No hubo tiempo para más y los leoneses sumaron la tercera derrota consecutiva que deja muy complicado el acceso a un playoff que acariciaban no hace mucho.