El Oviedo hace desaparecer a la Cultural

Como prometió Anquela, no iban a renunciar a la posesión. Cultural y Oviedo libraron una batalla en los primeros minutos para ver quién dominaba el balón que fue muy igualada. Rubén de la Barrera, para suplir la baja de Yeray, ideó un trivote como Mario Ortiz de pivote, rodeado de Señé y Samu como interiores para tratar de ganar la batalla en la medular.

Era una pelea equilibrada que se decantó de lado carbayón por una falta de intensidad en una acción concreta. Diegui robó un balón y cabalgó hasta el área culturalista sin oposición, donde perdió el balón. Pero le cayó a Aarón Ñíguez que se adentró en el área y, tras tocar en Albizua, su disparo despistó a Jesús Fernández y puso el 1-0.

Este tanto dejó tocada a la Cultural. Los asturianos dominaron y llegaron a su antojo ante un equipo leonés que no reaccionaba. El ritmo altísimo de los de Anquela justo en el momento en el que la Cultural tenía las 'defensas' bajas pudo acabar con el 2-0, pero los carbayones no acertaron.

Poco a poco, los de De La Barrera se repusieron del golpe. Rodri, motivado por su buen rendimiento en los últimos partidos, comenzó a dejarse ver y tuve el primer acercamiento con peligro. Condujo el balón por la frontal y disparó cruzado con la zurda, pero el disparo se fue fuera.

La defensa de cinco de los ovetenses impidió que el sevillano pisara demasiado el área, así que confió una buena parte de su arsenal ofensivo al chut lejano.

La Cultural creció y, con media hora de juego cumplida, llegó la ocasión más clara. Buendía 'flotó' por la frontal del área, esquivando piernas y buscando una rendija para colar el balón. La encontró, viendo a Aridai habilitado, que se quedó solo ante Alfonso Herrero. Tenía dos opciones: ceder a Rodri, justo a su lado, o disparar, pero eligió regatear al portero toledano, que fue capaz de sacar la pelota y abortar el peligro de los leoneses.

Los culturalistas se volcaron en ataque, viendo que el empate era posible. Y en una de esas jugadas, el Oviedo les pilló a la contra. Diegui se quedó solo en la medular, con 40 metros por delante, tuvo demasiado tiempo para pensar y, al llegar ante Jesús Fernández, el meta culturalista le ganó la partida.

Esta jugada fue la firma de la tregua hasta el descanso, periodo en el que se lesionó Albizua. En una carrera con Berjón, el vasco sufrió un 'latigazo' en la parte posterior de su pierna, que hace presagiar que padece una lesión muscular, que le obligó a abandonar el césped y dejar su puesto a Gianni.

En la segunda mitad, parecía que la Cultural podía aspirar al empate. Algunas ocasiones de los leoneses, la más clara la de Samu Delgado, hacían pensar en una posible remontada. Pero ese pensamiento se difuminó rápidamente.

Linares tuvo una clara ocasión que abortó Jesús Fernández pero, minutos después, los ovetenses pusieron el 2-0. En una falta lateral, Carlos Hernández remató solo ante la pasividad y las dudas de Jesús Fernández a la hora de salir.

Este tanto noqueó a la Cultural. Los asturianos pudieron marcar el tercer en varias ocasiones, la más clara de Aarón Ñíguez que, a centro de Berjón y en el segundo palo, cabeceó al poste.

Las soluciones que propuso Rubén de la Barrera fueron Guarrotxena y Antonio Martínez. El vizcaíno, en el primer balón que tuvo, probó a Alfonos Herrero con un disparo colocado que el toledano envió a córner. La Cultural llegaba con cuentagotas ante una defensa carbayona muy sólida. Emi, con una chilena estuvo a punto de sorprender, pero la seguridad asturiana no hacía prever un gol culturalista.

La sentencia acabó llegando. De nuevo por la banda izquierda, aunque esta vez sin Berjón en el campo, el Oviedo pisó línea de fondo y el centro, en el segundo palo, llegó a los dominios de Cotugno para poner el 3-0.

Victoria sin paliativos de un Oviedo infinitamente superior a la Cultural. Los carbayones aprovecharon el mal endémico de los de De La Barrera, los errores en defensa, para golpear en tres ocasiones a los leoneses y acercarse al ascenso directo mientras que deja a la Cultural en el vagón de los que pelearán por salvarse.