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Al mal tiempo, bufanda y cánticos. Ante la lluvia, bares y buen ánimo.
Centenares de seguidores del Unionistas de Salamanca han tomado el centro de León en una mañana donde el día les ha dado la espalda.
La lluvia constante y el viento se han sumado a la fiesta que obligaba a reforzar la seguridad en la ciudad durante las horas previas al encuentro entre el conjunto charro y la Cultural -17:30 horas, Reino de León-.
Se esperan más de mil seguidores llegados de Salamanca en este día. Por ello se ha podido ver una alta presencia policial durante la mañana. La Policía Nacional ha tomado el mando de las operaciones y la Policía Local participaba en un dispositivo especial para garantizar el buen ambiente entre ambas aficiones.
Los colores blanco y negro se han quedado en el interior de las prendas de abrigo y los paraguas han tomado el mando de la situación, aunque siempre había alguno que no necesitaba resguardarse demasiado.
Los bares del centro de la ciudad han vuelto a tener que colgar los carteles de completo en los puntos neurálgico de Torres de Omaña -donde se preveía la quedada unionista- y en San Martín.
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Durante la mañana, los seguidores salmantinos se impusieron a los culturalistas, que optaron por velar armas en casa ante lo desagradable y desapacible de la jornada. A ellos ya les tocó mojarse la semana pasada, a domicilio, en Lugo.
La verdadera cita será por la tarde, en el Reino de León, donde la batalla importante se llevará al césped para lograr la recompensa de tres puntos muy importantes.
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