El 'ataque de entrenador' de Idiákez da un serio disgusto a la Cultural en Oviedo

El equipo leonés adoleció de ideas y, lo que es peor, de ambición e intensidad necesarias para competir y acabó pagando su dejadez ante el CD Covadonga, la peor defensa y el peor equipo del grupo y que apenas sufrió ante el ataque de los blancos. Los asturianos se han impuesto 1-0 en Oviedo a una desconocida Cultural.

Fracaso estrepitoso de las rotaciones de Iñigo Idiákez ante el colista. El técnico tuvo un 'ataque de entrenador' y utilizó un once poco reconocible que no cuajó en una horrible primera parte de los leoneses. Ciampichetti, Bravo, Theresin, Luque o Rovirola formaron de inicio dejando en el banquillo a Eric, Héctor, Sergio Marcos, Dioni o Araújo.

Pronto se empezó a ver que el equipo no encajó y las cosas no funcionaban como se habían imaginado en la cabeaa del vasco. Aunque Pipo fue el primero en llevar el peligro al área rival, con una semivolea que se marchó por encima del larguero, la realidad es que el Covadonga ya se había hecho con el dominio del partido y embotellaba a los leoneses en su propio área.

El colista se reveló a una Cultural desdibujada, parca en ideas y poco metida en la importancia de los tres puntos. Los asturianos dominaban, corrían y presionaban muy arriba. Fruto de ese juego empezaron a llegar sus ocasiones. La primera, en un centro de Neredo que Manu Blanco remató desde el corazón del área muy cerca del palo de la meta leonesa. Y después, una aún más clara: Castañeda se resbaló, Theresin salió al paso de Edu Font y el regate del jugador dejó 'fuera de juego' al defensa para que éste se encontrara ante Zubiaurre, que salvó el 1-0 con una gran parada.

Pasaban los minutos y seguía sin despertarse la Cultural en la matinal desde el barrio de Teatinos. Los visitantes fallaban pases sencillos y cometían errores. Y el castigo a la desidia leonesa llegó en el minuto 38. Álvaro García cogió un balón un poco más allá de la línea de medio campo y soltó una volea envenenada que hizo la 'folla seca' para caer junto al larguero de Andoni y colarse en la portería poniendo un merecido 1-0.

Todo el bagaje ofensivo de los blancos se limitó a un tiro entre palos, casi al final, tras un centro de Pipo que remató de cabeza Álvaro Juan a las manos de un portero asturiano que no había tenido trabajo.

No tardó Idiákez en remover a su equipo buscando una reacción que no llegó con el inicio de la segunda parte. Hasta cuatro cambios en los primeros diez minutos pretendían cambiar la mala imagen. Apenas una volea de Bravo desde la frontal que se marchó fuera fue el bagaje ofensivo de un cuadro leonés que seguía buscándose sobre el césped artificial del antiguo Castañales.

El Covadonga replegaba líneas y la Cultural trataba de apretar con el paso de los minutos, aunque las prestaciones ante el área de Aitor eran muy pobres. La mejor ocasión fue para Luque, tras un centro al área que no consiguió rematar en posición franca.

El peligro de los leoneses llegaba tan solo a balón parado. En otro centro de Luque, ninguno de los visitantes logró conectar con un centro que se acabó marchando fuera. Y en un lanzamiento muy lejano de Escardó, tuvo que ser ahora sí Aitor el que interviniera para salvar a los suyos.

Se rompía el choque y al contragolpe el Covadonga buscaba la sentencia. Naredo finalizó una acción que acababa en las manos de Zubiaurre.

En el minuto 86, la Cultural vio cómo le anulaban el tanto del empate. Un centro al segundo palo lo remata Bravo en posición antirreglamentaria y el rechace para Dioni lo mandaba para adentro, pero no valía. E instantes despuñes, de nuevo Escardó la buscó con un tiro lejano que se fue fuera.

Y los compases finales fue el ejemplo de la desidia de un equipo que rozó el esperpento en la matinal ovetense. El Covadonga controló la situación y pudo matar el partido en campo de su rival. No hubo más opciones y los leoneses sumaron una derrota en el momento menos esperado.