No se hizo esperar la primera nevada del año tras un 2023 que cerró seco para la provincia de León.
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Durante toda la jornada del viernes, la zona norte de la provincia se fue llenando de blanco para recibir a los Reyes Magos y amanecer con el regalo en el árbol y la imagen más típica del invierno leonés en la montaña.
La provincia ha amanecido este Día de Reyes con espesores de entre diez y veinte centímetros en algunas zonas. Los Argüellos, la montaña central, Babia o Laciana han sido las que más nieve han recibido.
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Rubén Fariñas
La nieve ha permitido a los más pequeños disfrutar y ha dado algún que otro dolor de cabeza a los más mayores.
Las carreteras que conectaban el centro con el norte de la provincia se han visto afectadas en mayor o menor medida, en especial las que parten desde la capital leonesa hacia Asturias. También en El Bierzo hubo problemas en las comunicaciones con Galicia.
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Más allá de incidencias en las principales vías, León dibujaba este 6 de enero una imagen que estaba esperando con ansia en este invierno. Pueblos invadidos por la nieve, volver a espalar y hacer rueda, algo a lo que están acostumbrados en la montaña, era ya casi un deseo para muchos.
Durante la jornada de sábado se prevé que la situación se mantenga. La alerta amarilla por nevadas permanece activa. Ya de cara a la próxima semana, la cota de nieve se desplomará y la situación puede afectar a toda la provincia.
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