

Secciones
Servicios
Destacamos
La Semana Santa es tradicionalmente uno de los momentos clave para el turismo rural en León, pero este año la campaña ha estado marcada por la inestabilidad meteorológica y un cambio en la forma de reservar. Según varios propietarios de alojamientos rurales, las reservas han llegado más tarde de lo habitual, y las cancelaciones han sido más frecuentes, en parte por las lluvias anunciadas en los primeros días festivos.
Desde Aletur, la Asociación de Empresarios de Turismo Rural, reconocen que ha sido una Semana Santa «un poco más floja que en otras ocasiones». Muchas casas han colgado el cartel de completo, pero otras siguen anunciadas en plataformas como Booking o Airbnb incluso en plena semana festiva.
Merche Ramos, propietaria de Casa Pita San Justo, ubicada en San Justo de la Vega, confirma que «las reservas han sido más tardías, sobre todo en la parte central de la semana». Aun así, logró completar la ocupación salvo lunes y martes.
Merche Ramos
Propietaria de Casa Pita San Justo
«Este año la gente ha esperado mucho más para reservar, no como en los últimos años», añade. En su caso, la ventaja es estar situada en el Camino de Santiago, lo que atrae a peregrinos incluso con poca antelación.
En Cimanes del Tejar, Nuria González, de Las Cabañas de Tino, vivió una experiencia opuesta.
«Esta Semana Santa hemos tenido lleno total desde enero. Incluso nos siguieron llamando cuando ya no teníamos huecos», explica. Asegura que «la gente está tirando más a los pueblos porque León capital está muy caro».
Maribel
También María Isabel, que gestiona una casa rural en la Aldea de la Valdoncina, apunta que la suya «se reservó a finales de febrero», y destaca que «Semana Santa sigue siendo una fecha muy señalada». En su caso, la visibilidad en Booking ha sido clave para mantener el flujo de clientes.
No todos los alojamientos han tenido buenos resultados. María Silvia Blanco, responsable de tres casas rurales en la zona de Picos de Europa, califica la campaña como «bastante regular, bastante mal». Aunque había reservado una de las casas más grandes con antelación, sufrió una cancelación en febrero y ya no logró volver a llenarla.
María Silvia Blanco
Responsable de tres casas rurales en la zona de Picos de Europa
«Es el primer año en 20 que llevo, que tengo un trimestre tan flojo», lamenta, y cree que la menor visibilidad de su zona tras el boom post-COVID puede haber influido. También apunta al temor al mal tiempo: «Siempre llovió o nevó, pero ahora dan la previsión y la gente ya no se arriesga».
Josefa, desde El Mirador del Bierzo, también nota un descenso.
Josefa
Propietaria de El Mirador del Bierzo
Aunque finalmente ha llenado los días clave, afirma que «el año pasado recibí más llamadas». Tras una cancelación a finales de enero, solo una reserva posterior se ha mantenido.
Publicidad
Publicidad
Te puede interesar
Conservas Nuevo Libe, Mejor Anchoa 2025
El Diario Montañés
Publicidad
Publicidad
Esta funcionalidad es exclusiva para registrados.
Reporta un error en esta noticia
Comentar es una ventaja exclusiva para registrados
¿Ya eres registrado?
Inicia sesiónNecesitas ser suscriptor para poder votar.