Industria obliga a cerrar las ITV y no habrá multas por no pasar la revisión en Castilla y León

La Secretaría General de Industria y de la Pequeña y Mediana Empresa, dependiente del ministerio de Industria, remitió este martes por la mañana un escrito a la delegación del Gobierno y a la Junta para que informen a las empresas que prestan el servicio de que su actividad no se incluye dentro de las excepciones recogidas en el artículo 10.1 del decreto aprobado el 14 de marzo y que, por lo tanto, deben cerrar sus instalaciones. Y la instrucción llega después de que varios de estos negocios abrieran sus puertas durante las últimas horas.

El sector ha estado sumido en las dudas durante los últimos días, con estaciones clausuradas y otras que han seguido adelante con su actividad. El lunes, por ejemplo, ya no abrió la del polígono de Argales (junto con otras de la comunidad, como Toro, Ávila o Aranda de Duero). La empresa Itevelesa, con sede en Madrid, informó en su página web de que si algún cliente tenía cita en alguna de ellas, podía «acercarse al centro ITV más cercano –en el caso de Valladolid, el del polígono de San Cristóbal– con la confirmación de cita o el pago de la estación en donde tenía previsto pasar la inspección».

Esto provocó que tanto el lunes como el martes por la mañana las instalaciones de la calle Acero –que sí permanecieron abiertas– registraran una afluencia mayor de conductores, aunque también se ofrecía la posibilidad de cambiar o anular la cita.

A primera hora de la tarde («actuando conforme a las indicaciones de las autoridades competentes») y después de esa comunicación del Ministerio de Industria en la que se recordaba que su apertura no estaba autorizada, San Cristóbal también dejó de dar citas. El sector entendía que había una indeterminación en la norma que les permitía abrir, mientras que el Gobierno recordó que su actividad, como la de los concesionarios de vehículos, no se encuentra recogida entre las que tienen apertura autorizada durante estos días con la situación de alarma en vigor.

De hecho, la propia empresa recordaba en su página web el lunes y el martes por la mañana que el servicio «se puede suspender en función de cómo avance la crisis sanitaria y de las decisiones que tome la Junta o, si asume el mando, el Ministerio de Sanidad». Por ejemplo, aunque abrieron el lunes (ya con la alerta sanitaria declarada), el martes ya no estuvieron operativas las inspecciones en Palencia, Cervera de Pisuerga, Herrera de Pisuerga y Vitigudino, en una cascada de cierres hasta que Industria decretó la clausura de todas ellas. La empresa TÜV SÜD, que gestiona la estación de Cuéllar (muy utilizada por conductores vallisoletanos) también estuvo abierta el martes por la mañana.

Los trabajadores de estas estaciones en funcionamiento tanto el lunes como el martes dispusieron de «guantes protectores y mascarillas para evitar el contagio directo con los demás compañeros y clientes».