El sindicato USO utiliza al alcalde de Villaquilambre para intimidar a la Policía Local

Así consta en el informe policial elaborado por los propios agentes y al que ha tenido acceso leonoticias en el que se detalla la connivencia verbal entre los representantes sindicales y el primer edil ante los requerimientos policiales por una acción ilegal.

En concreto, el detalle del informe policial, deja ver que en esa fecha dos representantes sindicales (entre ellos el secretario general de USO en León, Antonio Nicolás) recurrieron a Manuel García para 'contener' a los dos agentes municipales que les requerían su identificación por colocar carteles de forma irregular en el término municipal relativos a un conflicto laboral en Navatejera.

Los sindicalistas actuaron en ese momento con la connivencia del edil quien, según el relato de los agentes, instó al líder de USO a que requiriera a los policías su nombre y número de placa.

Pese a esa acción los agentes mantuvieron su posición de realizar un informe sobre lo sucedido y proceder a la correspondiente sanción, finalmente no aplicada al desistir USO de continuar en la práctica de instalar carteles de forma irregular en el municipio.

Fuentes municipales han asegurado a leonoticias que la acción de los representantes del sindicato fue de «complicidad» con el alcalde Manuel García quien no solo no recriminó la acción sindical realizada sino que se posicionó «frente a los agentes» al instar a que se les requiriera nombre y número de placa.

En el propio relato de los policías se puede advertir que «en presencia de los agentes, el secretario provincial de USO se pone en contacto telefónico con el alcalde de Villaquilambre, Manuel García, comunicándole que estaba siendo identificado por dos policiales locales dentro del contexto de la actuación, interesándose quiénes eran los policías y requiriendo su identificación«.

Igualmente se concluye que los agentes «les estaban informando que la conducta realizada (pega de carteles sin permiso en lugares públicos) incurre en la infracción de la Ordenanza Municipal e instándoles a la retirada de los carteles colocados en el mobiliario urbano, sin que en ese momento procedieran a ello«.

Fue horas más tarde y previsiblemente ante la certeza de la existencia del informe policial cuando secretario general de la Unión Sindical Obrera (USO) en León y otro sindicalista optaron por retirar los carteles tras una segunda ronda de conversaciones con el propio alcalde.

Antonio Nicolás, secretario general de USO, pese al informe policial en el que se evidencia lo sucedido ha asegurado este lunes que él nunca llamó al alcalde. «Yo no le llamé; le llame, pero más tarde», ha asegurado a leonoticias.