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Trabajo con premura para abrir cuanto antes el nuevo centro de ayuda humanitaria que instalará en el antiguo Chalé del Pozo, en la localidad de Villarrodrigo de las Regueras.
La intención es que estas instalaciones abran sus puertas a los migrantes «que buscan refugio» durante este mes de junio, con una primera fecha estipulada en el 21 de junio como un centro «de emergencia» que cerrará sus puertas apenas dos meses después, el 31 de agosto.
Y, para ello, trabajan a destajo. En estos días, se están realizando distintas entrevistas de trabajo para contratar al personal necesario en este centro que «no será escaso», señalando que el trabajo de atención va a ser 24 horas los 365 días del año, por lo que se necesitarán distintos turnos de empleados.
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A la par, se espera que haya reuniones con alcaldes, representantes locales, la gerencia de Servicios Sociales y asociaciones de vecinos para explicar el proyecto, sensibilizar y tranquilizar. Todas estos encuentros están previstos para el 18 de junio, cuando se explicará al Ayuntamiento de Villaquilambre, a la Gerencia de Atención Primaria y a Servicios Sociales el proyecto. También tienen previsto reunirse con los vecinos.
Este dispositivo, coordinado con el Gobierno, da atención «a personas que buscan refugio y solicitantes de protección internacional» cumpliendo unos parámetros legales en todo momento.
Es decir, todos los migrantes que lleguen a este centro tendrán ya gestionada su solicitud de asilo, de ahí esa vía de «emergencia» de ser acogidos, en un primer momento, en este centro.
Estos migrantes irán llegando de forma escalonada para que la acogida se pueda producir de la mejor manera posible en este centro.
San Juan de Dios ya cuenta en León con 118 plazas de acogida humanitaria, 76 de ellas en el centro de La Fontana, en Armunia, y otras 42 en pisos. Esta ayuda consta de dos etapas, una de acogida – compuesta íntegramente por los usuarios de La Fontana – y una segunda de autonomía personal, repartidas en siete pisos por la ciudad. Uno de ellos, con nueve plazas, está destinado a mujeres violencia de género, tanto aquí como en su país.
Este Programa de Protección Internacional (PPI) de San Juan de Dios se puso en marcha en 2019 es un proyecto financiado por el Ministerio de Inclusión, Seguridad Social y Migraciones y que en León, sólo en 2023, ha acompañado a 279 personas -196 adultas y 83 menores- de 26 nacionalidades.
El Programa de Protección Internacional (PPI) tiene una duración de 18 meses y se estructura en dos fases: acogida temporal y preparación para la autonomía gracias al diseño de itinerarios personalizados de inserción sociolaboral. Y es que la llegada de una persona refugiada a un país de acogida no supone el fin de su calvario.
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