Un día lleno de emoción y lágrimas para los familiares y amigos de los alumnos de la XXXII Promoción de la Academia Básica del Aire que observan como el esfuerzo de tres años de academia llega a su fin. La ABA de la Virgen del Camino ha entregado en la mañana de este jueves 4 de julio los Reales Despachos a 338 nuevos sargentos.
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Formación, disciplina y sacrificio fueron los ingredientes principales que la ABA inculcó a sus alumnos desde el primer día de llegada a la academia. Desde 2011, el plan académico, cuenta con una duración total de tres años en los cuales, los sargentos alumnos, pueden elegir especializaciones en diferentes puntos del país.
El Rey Felipe VI ha sido el encargado de presidir el acto que reconoce a los alumnos de tercer curso como nuevos sargentos listos para volar a sus destinos. El número de despachos entregados ha ido creciendo con el paso de los años. En el curso pasado fueron 275 los nuevos hijos del aire y del espacio, aumentando la cifra este 2023 hasta 46 plazas más. Algo que no solo ocurre en los terceros cursos ya que en esta nueva promoción 24/25 se ampliaron en 19 las plazas ofertadas.
El acto, en el que han participado las principales autoridades como el presidente de la Junta de Castilla y León, Alfonso Fernández Mañueco así como el alcalde de León, José Antonio Diez y el presidente de las Cortes de Castilla y León, Carlos Pollán, se ha desarrollado bajo el sonido de trompetas y tambores a manos de la banda de la Academia Básica del Aire.
El izado de bandera acompañado del himno de España ha dado comienzo a la entrega de despachos. El Rey Felipe VI ha aterrizado en el Aeródromo acompañado de las máximas autoridades y ha procedido a saludar a todos los presentes.
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El primero en recibir el real despacho entregado por el rey Felipe VI ha sido el número uno de la promoción el Sargento Don Eloy de la Varga Iglesias. Tras esto, el resto de sargentos han ido pasando en grupos a la entrega de sus despachos por parte de las autoridades tras ser llamados.
Tras finalizar la entrega de despachos, ha sido el Coronel el encargado de impartir «la última lección del curso». El discurso ha comenzado lamentando la pérdida de Pablo Giménez Murillo fallecido el 22 de diciembre en acto de servicio mientras volvía a casa. Con un «la muerte no es el final» ha querido acompañar a su familia en este día «tan duro» para ellos. El coronel daba por finalizado un periodo de formación «muy intenso» en el que los alumnos han «agudizado sus mentes y fortalecido sus cuerpos». Una formación que ha contribuido en la capacidad para «liderar personas» y que ahora les requerirá de equilibrio y serenidad.
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«No pierdan la oportunidad de inspirar al resto, no aspiren a ganarse la vida sino a crecer en ella», indicó el coronel. Tras su discurso este aseguró que se trataba de una «muy buena» promoción y que se encontraban «muy orgullosos» por la dedicación y compromiso de los alumnos.
«Bienvenidos a nuestro equipo, bienvenidos al ejército del aire y del espacio», concluyó. Con un curso de formación que ha abarcado más de 2.500 alumnos «sin perder la esencia en valores, lealtad y disciplina» el rey, Felipe VI ha dado la orden de romper filas como último acto. La cuna de la aviación leonesa recibía a sus nuevos sargentos.
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