Glorias: nuestra corona de santo
ciencia en píldoras ·
Las glorias también se ven desde un avión cuando vuela por encima de las nubes.Secciones
Servicios
Destacamos
ciencia en píldoras ·
Las glorias también se ven desde un avión cuando vuela por encima de las nubes.La interacción entre la luz del sol y la atmósfera da lugar a un gran número de extraordinarios fenómenos ópticos: el arcoiris normal, el reflejado, el horizontal y el rojo, los halos, los espejismos, los colores crepusculares, las coronas, las glorias, etc. Cada uno tiene ... su propia explicación. Hoy disfrutamos con las glorias.
Si estamos en una cumbre con el sol a nuestra espalda, espacio libre a nuestro frente y nubes de gotas muy pequeñas en la lejanía, podemos ver, en ellas, nuestra sombra que marca el punto antisolar y, alrededor de ella, unos anillos concéntricos multicolores, llamados glorias. Habría que llamarles círculos o coronas de Ulloa pues fue este científico y militar español, en una expedición a América del Sur, el primero que las describió (1748). Cada uno, con las condiciones adecuadas, puede ver su gloria, pero no la de los demás. Así, al verla, podemos creer que hemos alcanzado la santidad. La sombra no juega ningún papel, solo marca el punto antisolar en el que se produce una retrodispersión de la luz. Este efecto desvía la luz solar casi 180 grados. La explicación científica, con puntos oscuros, es mucho más compleja que la del arcoíris. Las glorias también se ven desde un avión cuando vuela por encima de las nubes. En ellas aparecen los círculos de colores alrededor de su sombra. También pueden llegar a verse con luz artificial, en la niebla, etc.
El primer intento de explicación se basaba en que la luz incidente entra en la gota debido a una refracción en su superficie (un cambio de dirección), le sigue una reflexión en su interior y sale sufriendo otra refracción. En palabras poco técnicas: los rayos de luz incidentes son doblados en su recorrido por la gota, y salen en sentido contrario al rayo incidente. Sin embargo, la capacidad del agua para doblar los rayos, no es suficiente para que salgan en la misma dirección del rayo incidente.
Una segunda explicación supone que los rayos al llegar a la gota se comportan, durante un tiempo muy corto, como una onda. Durante ese tiempo realizan un pequeño recorrido curvo sobre la superficie de la gota, antes de entrar en su interior, donde experimentan una reflexión. Al salir de la gota, antes de abandonarla, también realizan el pequeño recorrido curvo. Sin embargo, este efecto, que puede tener lugar, no es suficiente para explicar la contribución a la energía general que se ve en la gloria y, por tanto, para que el rayo de salida lo haga con la misma dirección que el incidente.
Una tercera explicación es una teoría matemática de la dispersión de la luz, pero sin información sobre la física que subyace en el fenómeno. Información que se ha conseguido con la incorporación de un efecto túnel a las ondas clásicas. Un concepto de la física cuántica: una interacción entre una onda de luz evanescente que viaja a lo largo de la superficie de la gota, con las ondas que experimentan reflexiones dentro de la gota. Con este efecto la teoría cumple la exigencia para la gloria; que la luz que entra y sale de la gota lo hace en la misma dirección y sentido contrario.
Publicidad
Publicidad
Te puede interesar
Carnero a Puente: «Antes atascaba Valladolid y ahora retrasa trenes y pierde vuelos»
El Norte de Castilla
Publicidad
Publicidad
Esta funcionalidad es exclusiva para suscriptores.
Reporta un error en esta noticia
Comentar es una ventaja exclusiva para registrados
¿Ya eres registrado?
Inicia sesiónNecesitas ser suscriptor para poder votar.