La Universidad de León volverá a apostar por la presencialidad y el rastreo en el nuevo curso académico

De esta forma, la ULE ultima así los detalles para el retorno de sus alumnos a las aulas con, al menos, los mismos protocolos , siempre a la espera de posibles cambios que pueda introducir la Junta de Castilla y León en los protocolos, pues será la administración autonómica la que marque las pautas: «Si ellos nos permiten tener las aulas al 30 por ciento, las tendremos al 30 por ciento, pero si nos permiten tenerlas al 80, así será», ha explicado la vicerrectora de Estudiantes, Ana Isabel García a Leonoticias.

A este aforo limitado de las las clases se unen las medidas de sobra conocidas, como al distancia personal de seguridad, que también será establecida según lo requerido por la Junta; la mascarilla obligatoria; los dispensadores de gel hidroalcóholico con pedal; así como diversas herramientas que permitirán fraccionar a los grupos más amplios, como las aulas espejos.

El Servicio Epidemiológico de la Universidad de León repetirá un año más como uno de los protagonistas del curso académico. Su labor seguirá siendo fundamental para el pleno funcionamiento de las facultades del centro educativo leonés: «Para que todo funcione de forma correcta vamos a seguir necesitando de las labores de rastreo y vigilancia», ha indicado la vicerrectora, un escenario que gracias a la campaña de vacunación promete ser más tranquilo que el anterior.

El protocolo seguirá siendo el mismo: los miembros de la comunidad universitaria que presenten síntomas deberán auto-aislarse en su domicilio y comunicarlo a las autoridades académicas así como al Centro de Salud, hecho que facilitará la búsqueda 'contactos estrechos' dentro de la institución universitaria.