Las 500 plazas sin ocupar de la ULE supondrán que León deje de ingresar más de 4 millones de euros

Y es que, tal y como indican diversas cifras, el gasto medio de un estudiante universitario supera los 6.500 euros de media por cada curso escolar, calculado con una duración de 10 meses, siendo una cifra que oscila según la situación de cada estudiante, al alza en los casos que llegan de países extranjeros y a la baja en los casos de aquellos universitarios que residen con sus familias en la capital. En total, las 500 plazas sin ocupar en León provocarán que no se realice un gasto que ronda los 3.500.000 euros, a lo que hay que sumar el impacto de las matriculas universitarias, cuyo desembolso va directo a la ULE.

Un impacto económico que toca casi todos los sectores de la economía leonesa, lo que supone que numerosas familias vean la repercusión que los usuarios de la Universidad de León generan sobre la ciudad, lo que resalta la importancia de mantener el atractivo de esta institución educativa, tanto para mantener a sus jóvenes como para atraerlos.

El mayor esfuerzo económico que los estudiantes y sus familias realizan es la vivienda. La media de este desembolso en un piso compartido, según los datos del coste de vida de la ciudad que ofrece la propia Universidad en su pagina web, es de 180 euros. Un monto mayor en el supuesto de que los alumnos acudan a una residencia, opción que eligen el 15% de los universitarios a nivel global, aunque en el caso concreto de los estudiantes de primer año de carrera esta cifra puede llegar a alcanzar el 40%. El precio medio de las residencias universitarias se encuentra en 750 euros.

A mayores, los alumnos de la ULE que opten por el piso compartido tendrán que hacer frente a los gastos del mismo en agua, luz y calefacción, que pueden rondar los 30 euros, que a mayores suma otra partida para telefonía móvil e Internet, así como a los pagos derivados de su alimentación. En este caso, la web de la Universidad señala nuevamente que el gasto medio estimado por estudiante en León es de 80 euros, una cifra que crece en otras estadísticas como la Encuesta sobre el Gasto de los Hogares en Educación del Instituto Nacional de Estadística , donde supera los 90 euros por persona.

Otro sector económico que se beneficia de la llegada de alumnos a la Universidad de León es la hostelería y la restauración. El estudio de coste de vida de la ULE estima que el café o la caña en la ciudad se paga a 1.20 euros. Suponiendo que el estudiante unicamente consume 1 café o una cerveza al día, se trataría Ocio yde 36 euros mensuales por cada uno. Un cifra multiplicada por las 500 plazas vacantes advierte que León dejará de ingresar 18.000 euros al mes solo en este apartado, al que a mayores habría que sumar los gastos en restaurantes.

En el apartado de ocio y entretenimiento, se estima que los universitarios leoneses consumen más de 20 euros al mes en cine, conciertos, eventos culturales varios o cualquier tipo de entrada para acontecimientos. A lo que habría que sumar un gasto medio de 10 euros al mes de cuota de gimnasios, pues se entiende que solo 1 de cada 3 alumnos acuden a este tipo de instalaciones, para las cuales la propia ULE ha tasado en 30 euros su media de gasto, lo que desde un enfoque anual supone una estimación de 50.000 euros que no aterrizarán en estos centros deportivos.

También en el apartado de salud e imagen personal, la media de gasto en salud es de 20 euros en farmacia, así como una media de 20 euros por persona en peluquería y productos de estética. En moda, se estima que son cerca de 40 euros los gastos que cada estudiante de la Universidad realiza cada mes. Todo ello, multiplicado por estos cinco centenares de plazas vacías, suponen 400 mil euros a nivel anual.

La Universidad de León también genera gastos académicos en sus estudiantes, de hecho, es una cifra que ha crecido durante la pandemia. Libros para clase, revistas, publicaciones y periódicos, así como papelería, fotocopias, entre otros, eleva la cifra en casi 50 euros más por cada uno de los estudiantes. Es decir, 25.000 euros al mes que la ciudad no verá. Un número que se ve incrementado por el gasto medio en academias, tanto las de apoyo como las de idiomas, cuya media se situá en 30 euros por alumno al mes.

El tabaco y las chuches u otros pequeños vicios alcanzan una media de hasta 15 euros entre los universitarios al mes, así mismo, el transporte, tanto dentro de la ciudad, como en los casos que es necesario para volver a casa, alcanza una media de entre 40 y 50 euros por alumno, pues además se incluye los viajes de placer que realizan los universitarios durante los 10 meses que dura el curso. Y por último, se estiman unos 50 euros para otros gastos varios, como puede ser la necesidad de renovar equipo informático, técnicos, bicicletas u otros.