El coronavirus no se presenta a la primera convocatoria de exámenes de la Universidad de León

«Había que preocuparse, pero se tomaron medidas muy estrictas. Tuvimos un caso, el del vídeo de Educación, donde las cosas se salieron de control, pero por lo general, el orden y la responsabilidad era la tónica dominante», explica Vicente Martín Sánchez. «Se han cumplido todos los protocolos a rajatabla y ha funcionado».

El responsable del Sistema de Vigilancia Epidemiológica de la ULE (SiveUle) indica que llegaron a tener un positivo en un examen, pero gracias a la colaboración de los alumnos se consiguió frenar la transmisión. Martín Sánchez aplaude al alumnado de la ULE y señala que «nuestro sistema de vigilancia es bueno y funciona gracias a la gran colaboración de los propios estudiantes».

Según explica el coordinador de la pandemia en la Universidad, los exámenes no solo «han sido seguros de forma presencial», para Martín Sánchez han sido una de las causas que han ayudado a frenar la ola, pues «ayudaron a limitar la vida social, creando un mayor control».

La colaboración de los estudiantes fue uno de los factores claves para aortar los efectos de la tercera ola en la institución educativa leonesa, y es que, pese a los nervios añadidos de la prueba, los alumnos de la ULE han sabido encajar la tensión añadida que ha supuesto para ellos estos protocolos: «Estaban muy nerviosos y es completamente normal con esta tensión extra, pero yo he tenido un examen con más de 120 alumnos y ha sido absolutamente modélico, sin ningún problema».

«Llegamos a tener hasta 600 incidencias, más de 40 al día», recuerda el profesor universitario, que señala que aunque no fue el pico más alto, superado por la crisis del pasado mes de noviembre, si fue muy pronunciado, en donde el responsable de SiveUle indica como causas a las Navidades: «No llegamos a las cifras de cuando el problema con la Emilio Hurtado, pero para llegar a ese punto nos llevó tres meses, aquí llegamos en apenas tres semanas».

Desde la Universidad de León parecen haber conseguido controlar la tercera ola, «que llegó antes que a la ciudad y por tanto ha remitido antes», y Martín Sánchez afirma que «estamos tranquilos, pero no bajamos la guardia».

«Fue muy duro, pero se controló gracias avarios factores, no solo por el trabajo del servicio de vigilancia», destaca Vicente Martín. «Hay que resaltar el compromiso de los estudiantes a la hora de buscar los contactos estrechos en cada caso, unas facilidades que han sido claves para frenar la transmisión».

Para finalizar, la Universidad de León espera seguir reforzando sus defensas de cara a la vuelta a las aulas en este segundo semestre del curso. «Tenemos previsto un cribado de PCR con la colaboración de las residencias universitarias», señala el responsable del servicio, que afirma que de momento no hay planes para cribar nuevamente a la totalidad de la comunidad universitaria: «No tendría eficacia en estos momentos. Eso si, ha quedado probado de su importancia y sus beneficios cuando al curva empieza a crecer. Si los datos empeoran, no dudaremos en convocar otro».

De hecho, para Martín Sánchez, la ULE se está beneficiando del macrocribado celebrado en el Palacio de Exposiciones a toda la ciudad: «Han salido nuevos positivos, es una gran ventaja para nosotros, tanto para León como para la ULE».