El consejero de Movilidad y Transformación Digital, José Luis Sanz Merino, presidió la reunión del Patronato del Centro de Supercomputación de Castilla y León, en la que se hizo balance del presente año y se destacó la inversión superior a los 14 millones, motivada por el aumento en la potencia de cálculo del superordenador, además de incrementar la capacidad de almacenamiento y el ancho de banda de la red regional.
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Sanz Merino comentó que Scayle se abre a nuevas potencialidades y quiso poner el acento en una línea de trabajo concreta, la biocomputación, «vinculada a las actividades farmacéuticas también, muy significativas en León, a las actividades biológicas, a la medicina. Creo que ese es uno de los ámbitos en los que vamos a crecer».
En el encuentro también se dio luz verde al presupuesto para 2025, un año que marcará un hito con el avance de las obras de la nueva sede de la Fundación, que será un espacio clave para continuar su expansión y desarrollo. Las obras, que tienen un plazo de 18 meses, tienen prevista su finalización a finales del próximo año.
Previamente, se celebró la Comisión Ejecutiva que aprobó la lista de candidatos seleccionados para el desarrollo de los proyectos Cindirella y HOT, vinculados a la investigación en nuevas tecnologías para impulsar una industria nacional de soluciones autónomas robóticas.
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