UPA pide medidas para que la burocracia de la PAC no dificulte la tramitación

«A pesar de que el plazo comenzó hace más de veinte días, las aplicaciones que el Ministerio de Agricultura y las Comunidades Autónomas, como es el caso de Castilla y León, habilitan para solicitar las diferentes ayudas que conforman la PAC siguen siendo muy complejas, siguen sin estar pulidas y su funcionamiento es muy farragosas y notoriamente mejorables», apuntan en un comunicado recogido por Ical, donde recalcan que incluso en algunos casos el proceso está detenido por el mal funcionamiento de la aplicación SGA.

Una de las obligaciones que impone la nueva PAC es la de que cada agricultor rellene un cuaderno digital de explotación. Según la normativa actual, esta obligatoriedad entrará en vigor el 1 de septiembre de este año para los agricultores que dispongan de más de 30 hectáreas de cultivo o de pastos o más de 10 hectáreas de cultivos permanentes. En el caso de los que dispongan de menos hectáreas lo hará más tarde: el 1 de julio de 2024.

«Son las autonomías, en este caso la Junta de Castilla y León, quien debe facilitar a los agricultores y ganaderos las aplicaciones para el cuaderno digital a partir del 1 de julio de 2023», explican. Sin embargo, dada la complejidad de la gestión y el poco desarrollo de las aplicaciones informáticas, UPA ha pedido que esa prórroga se aplique a todas las explotaciones.

Contratación

En relación a la PAC, la Consejería de Agricultura, Ganadería y Desarrollo Rural ha comunicado al Consejo de Gobierno la contratación del servicio de desarrollo de funcionalidades de las aplicaciones informáticas para la tramitación telemática de expedientes incluidos en la solicitud única de ayudas PAC en la campaña 2023 en Castilla y León, por importe de 195.748 euros.Este servicio, además de desarrollar las herramientas de gestión de las condiciones y requisitos de la nueva PAC, en vigor desde el 1 de enero, permitirá interconectar las bases de datos de la solicitud única de ayudas con la aplicación de control por monitorización mediante imágenes por satélite, lo que mejorará los tiempos de gestión. Además, se facilitará el pago de los anticipos, tanto de la PAC como de las ayudas agroambientales.