La Junta pide apoyo al Gobierno ante la enfermedad hemorrágica epizoótica

El vicepresidente de la Junta, Juan García-Gallardo, y el consejero de Agricultura, Ganadería y Desarrollo Rural, Gerardo Dueñas, pidieron este lunes al Gobierno apoyo a los ganaderos y que deje de «aplastar» al sector primario de la comunidad, ahora afectado por la conocida como enfermedad hemorrágica epizoótica.

García-Gallardo y Dueñas, en declaraciones a los medios recogidas por Ical, se manifestaron así después de que esta mañana, el ministro de Agricultura, Pesca y Alimentación en funciones, Luis Planas, se declaró «indignado» con la Junta de Castilla y León y su presidente, Alfonso Fernández Mañueco, por la «politización» que considera que están haciendo de la respuesta a la enfermedad hemorrágica epizoótica (EHE), conocida también como 'enfermedad del mosquito' o la 'Covid de las vacas'.

El vicepresidente consideró que se trata de «una nueva cortina de humo» y pidió al Gobierno que facilite la vida del sector primario y deje de «aplastar» a sus profesionales. «No es una cuestión de politizar», manifestó poco después Dueñas, que afirmó que tienen solicitada una reunión desde el punto de vista político con el Ministerio no solo para pedir apoyo económico para el sector, sino para analizar la capacidad de movimiento del ganado.

Precisamente, el consejero tiene que responder en las Cortes en el pleno que comienza mañana a preguntas del PSOE y de UPL-Soria Ya en relación a las medidas que está adoptando la Junta de Castilla y León para mitigar tanto la enfermedad hemorrágica epizoótica, como las consecuencias económicas de la misma.

En relación a la reprobación pedida por la oposición socialista para el consejero de Industria, Comercio y Empleo, Mariano Veganzones, por su critica a los sindicatos y su mala gestión, García-Gallardo enmarcó tal iniciativa en el «momento muy particular» que vive el PSOE ante una posible investidura de Pedro Sánchez y las concesiones a los independentistas.

«Es una cortina de humo», interpretó ante «la pendiente de la ruptura de la unidad nacional», en referencia a los posibles acuerdos para que los independentistas puedan respaldar una investidura de Sánchez.

Precisamente, el Grupo Socialista ya pidió, sin éxito, la reprobación en las Cortes de García-Gallardo por lo que consideró falta de respeto a una procuradora socialista y por sus manifestaciones sobre la no existencia de violencia de género.

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