El campo considera que ha salido «maltratado» con los fondos de recuperación

Esa fue la esperanza que mostró el representante de Asaja, José Antonio Turrado, tras la reunión mantenida hoy con el presidente de la Junta de Castilla y León, Alfonso Fernández Mañueco, para fijar la posición de Comunidad que el líder del Ejecutivo autonómico llevará a la Conferencia de Presidentes que se celebra el viernes en Salamanca.

Turrado recordó así que el campo «va a recibir una partida escasa por parte del Ministerio» y que, además, existe una «mala distribución» de la misma porque «va orientada a sectores donde Castilla y León no tiene tanto peso como otras comunidades».

Es por ello que Turrado consideró «maltratado» al campo en un reparto que espera más justo con el resto de fondos «no a través de líneas de ayuda directa, sino para modernizar el campo y las inversiones que tenemos que hacer en maquinaria e instalaciones», así como para las inversiones públicas de las administraciones en la modernización de regadíos.

«Son fondos que tienen que venir para que el campo sea más rentable y competitivo», dentro de una configuración del sector en Castilla y León hecho «para la exportación», con una tendencia creciente en este campo y para el que pidió «facilidades para que la industria agroalimentaria salga a exportar», dado que eso generaría «dinero que puede retribuir a los productores».

En la misma línea se expresó el coordinador de UCCL en Castilla y León, Jesús Manuel González Palacín, al considerar que el sector agrario es «la cenicienta en estos repartos» cuando, por el contrario, se ha mostrado como «un sector fundamental en la pandemia», por lo que criticó que, en apenas un año, hayan pasado «de héroes a olvidados».

«Se podía haber destinado dinero a hacer muchas cosas en digitalización y economía verde, que podría haber planteado la reducción de costes a muchas explotaciones», expresó Palacín en rueda de prensa, criticando sin embargo que ahora esos fondos se han convertido en «una grandísima amenaza» por el impulso que van a dar a «macroparques eólicos y fotovoltáicos, que van a expulsar a muchos agricultores y ganaderos con apoyo de dinero público».

También se mostró crítico con el reparto de la primera remesa de fondos el coordinador de la Alianza UPA-COAG en Castilla y León, Aurelio González, al reseñar que los fondos son «escasos» y que parte de ellos va a regadíos «cuando esto debería plantearse a mayores» de la cuantía de los fondos europeos, dejando estos últimos para «proyectos de agricultores y ganaderos».

Despoblación

En cuanto al otro gran asunto que está previsto tratar en la agenda de la Conferencia de Presidentes del viernes, la despoblación, González trasladó al presidente de la Junta que debe exigir al Gobierno «políticas activas para incorporar mujeres al medio rural» a través de la «viabilidad económica» de las explotaciones agropecuarias.

Se trata así de una «buena iniciativa para sacar adelante nuestros pueblos» pero que tiene pendiente «conseguir la viabilidad económica para las explotaciones» que, de no llegar a través de la vía de los precios, «la ideal», se debe redirigir hacia «compensaciones económicas para los agricultores profesionales», para cuya defensa planteó la creación de un Estatuto del Agricultor y el Ganadero.

En la misma línea se movió Asaja, cuyo representante en la reunión de hoy, José Antonio Turrado, reivindicó la presencia de la agricultura y la ganadería en el debate sobre despoblación porque «es la agricultura la que genera actividad y empleo en el campo» y, a través de ello, «se genera población», con políticas como las que desarrolla la Junta para «la incorporación de los jóvenes».

PAC

Aprovecharon la reunión los representantes de las opas en Castilla y León para plantear a Mañueco otras cuestiones como la actual negociación de la aplicación de la nueva PAC (Política Agraria Común) en España, exponiendo su denuncia de que «no está orientada al agricultor profesional y va contra los intereses de Castilla y León», por lo que, en el caso de Turrado, pidió «explorar la posibilidad de corregir un poco el enfoque del Ministerio de Agricultura».

Más reivindicativo se mostró Jesús Manuel González Palacín, de UCCL, al criticar el «error» del ministro del ramo, Luis Planas, de «repartir el dinero a cualquiera», en relación al agricultor no profesional, por «falta de valentía política», frente a los modelos alemán o francés. Por ello, pidió a Mañueco aprovechar la Conferencia de Presidentes para plantearle la cuestión al presidente del Gobierno porque «cómo se reparte el dinero de la PAC es fundamental y estamos a tiempo», recoge Ical.

Otras cuestiones

Por último, los tres representantes de las opas revelaron que en la reunión con el presidente de la Junta se pudieron plantear otras cuestiones, ajenas a la Conferencia de Presidentes, como el Plan Hidrológico Nacional, donde Castilla y León «se juega mucho por la importancia del regadío», o la proliferación de parques fotovoltáicos que «echa a los agricultores y ganaderos del campo».

También se planteó nuevamente la situación generada por la inclusión del lobo en el Lespre, lo que impide su caza. Un debate que «no está resuelto» porque las propuestas del Gobierno «van contra Castilla y León», si bien el coordinador de UPA-COAG, Aurelio González, recordó que las competencias «son autonómicas» y que aunque ahora el Ministerio «se está metiendo en el problema», este ya existía previamente «porque no se han hecho los controles suficientes».

Alertó en ese sentido González de la posibilidad de que suceda lo mismo con el oso en la provincia de León, y también mostró la «preocupación grave» que existe entre los agricultores por el aumento de la población de jabalíes, ante lo que solicitó al presidente de la Junta «un control efectivo» antes de que suponga «un grave problema económico» por la posibilidad de que entre la peste porcina, «como ocurre en Alemania».