Asaja cifra en 933 millones la facturación del sector, pero lamenta «la peor renta agraria» de los últimos años

José Antonio Turrado ha recordado que de esa facturación hay que restar «la repercusión de los costes, lo que hemos gastado en semillas, fertilizantes, piensos, etc», además de un incremento de la energía, lo que supone un total de 690 millones de euros, «el 30% de lo que nos costó el año anterior».

En las cuentas del sector hay que añadir un total de 118 millones de amortización y por otro lado, sumar la PAC percibida en León y las ayudas con motivo de la covid que alcanzan los 117,5 millones.

«Todo ello lleva a una renta agraria de un 14 % inferior a la que tuvimos en 2021», pero si se tiene en cuenta la renta empresarial, hay que descontar lo que se paga a los bancos, el arrendamiento de las tierras y lo que se paga a los trabajadores, en este caso la caída es del 20%.

Las mayores perdidas se han dado en los cultivos de secano, ya que aquellos que dependen del agua de los pantanos han podido sobrevivir a un año muy seco. Por todo ello, desde Asaja piden que se ponga remedio a una situación prometida desde hace años.

«En la provincia de León dependemos mucho del regadía, por ello nuestro informe no es tan malo como puede ser en otro sitio», recordó en su intervención Arsenio García, presidente de Asaja. En este sentido, remarcó que «las producciones en el regadío moderno se ha mantenido, las del tradicional han tenido peor año, pedimos a las administraciones que aceleren todo el proceso de regadío y modernización».

El maíz sigue siendo uno de los cultivos estrella de la provincia, los cereales han vivido un año complicado, al igual que los forrajes y los pastos. El girasol y la colza aumentaron en su producción, pero la rentabilidad no ha sido bueno. Y desde Asaja han resaltado cultivos novedosos como la soja, el maíz dulce o la quinoa.

Entre ellos, no se han olvidado de la remolacha, un cultivo que podría tener una mayor producción en León, lo que se convertirá en un objetivo para este ejercicio. «En 2022 hemos tenido un 7% menos de remolacha que en el año anterior», remarcó José Antonio Turrado quien recordó que «la fabrica de La Bañeza tiene capacidad para moturar el doble, y ese es el objetivo».

La ganadería en la provincia sigue siendo, en su mayoría, de leche a pesar de haber sido un año complicado en cuanto a precios para el vacuno el cierre de 2022 ha estado acompañado de una subida de precio.

En la leche de ovino se ha producido un repunte alcista de los precios, no tan evidente como en la leche de vaca debido a que el desequilibrio en este sector no era tan grande. La producción estimada por Asaja es de 51,1 millones de litros, con un valor de mercado de 47 millones de euros.

Las explotaciones de porcino se han incrementado en los últimos años y los censos se estabilizarán debido a los incrementos de costes. El censo total de animales es de 147.654, lo que representa un incremento del 10,57%.

El valor de la producción asciende a 53,13 millones de euros, con la salvedad de que este valor de facturación se imputa a las empresas integradoras, radicadas fuera de la provincia.