Recreación de una estación para un tren hiperloop. Agencias

Tren del futuro (hyperloop)

El tren del futuro pasa por Europa: el cierre de Hyperloop One reafirma la apuesta de la UE

Musk ha echado la persiana de la empresa que creó hace diez años para desarrollar la tecnología que transportaría pasajeros y mercancías por tuberías y mediante levitación magnética a más de 1.000 km/h, pero eso no supone ninguna sentencia de muerte para este medio de transporte, que sigue muy vivo

Julia Fernández

Santander

Jueves, 28 de diciembre 2023, 00:22

No hay charco donde no se meta el polifacético Elon Musk. Además de las polémicas que le rodean por su carácter excéntrico, el multimillonario es también uno de esos personajes capaces de apostar por inventos casi inverosímiles o meterse en la carrera espacial. Uno de ... esos proyectos que casi suenan a ciencia ficción es el hiperloop, el supuesto tren del futuro, que prometía transportar pasajeros y mercancías en cápsulas que circularían por levitación magnética a través de tuberías de muy baja presión.

Publicidad

Hace diez años, Musk apostó por ello y fundó Hyperloop One, una de las empresas más grandes centradas en el desarrollo de la tecnología. Hace apenas siete días, anunció su cierre. El multimillonario ha puesto a la venta sus activos y ha despedido a la mayor parte de sus empleados. Sin embargo, esto no supone el final del tren del futuro. Porque la de Musk era solo una de las empresas implicadas en su desarrollo

Hyperloop One, que durante un tiempo sedujo también a otro adinerado empresario como Richard Branson, quería llevar pasajeros desde Los Ángeles a San Francisco en media hora. Era su proyecto original. Para ello, el dispositivo debía circular a casi 1.100 kilómetros por hora, algo que haría a través de tuberías de baja presión y por levitación magnética. En los últimos tiempos, sin embargo, cambió el paso y apostó por el transporte de mercancías.

La cifra

2.000 millones

de euros en presupuesto suman las siete empresas que hay en todo el mundo dedicadas a desarrollar hiperloop.

Durante este tiempo, la empresa ha recibido importantes inyecciones de dinero y apoyos desde el exterior, pero nada de eso ha sido suficientemente para que Musk mantenga su interés. Ahora echa la persiana y deja el campo libre al resto de proyectos que trabajan para desarrollar el tren del futuro, que no son pocos. En Estados Unidos queda Hyperloop TT, que en 2018 presentó su cápusla de fibra de carbono en el Puerto de Santa María y que cuenta con un laboratorio en Toulouse (Freancia); y en Canadá, Traspond. También hay otras iniciativas como la india DGWHyperloop

Antes que China

Pero es en el Viejo Continente donde se están dando grandes pasos para que este medio de transporte se convierta en una realidad. En 2020 se fundó el Centro Hyperloop Europeo (EHC por sus siglas en inglés), una iniciativa público privada con sede en los Países Bajos. Sus trabajos van a buen ritmo y ya ha comenzado a instalar una pista de entre 3 y 5 kilómetros de longitud para que esta 2024 se hagan las primeras pruebas con el hiperloop europeo. Sus planes, si todo sale bien, es que el nuevo medio de transporte una diez ciudades europeas, entre ellas, Zaragoza.

Publicidad

La UE también apuesta por esta tecnología y quiere incluirlo en la red transeuropea de transporte, algo que se está perfilando aún y que requiere de una regulación sobre la que se trabaja a marchas forzadas antes de que China consiga desarrollarla. De momento, esta ha hecho sus primeras pruebas a 50 kilómetros horas. Las previstas por el EHC para los próximos meses serán a 75. Entre las ventajas del hiperloop que lo hacen tan atractivo están su rapidez, que es menos contaminante y también que no depende de fenómenos meteorológicos.

Naves de Adif en Bobadilla que se iban a usar inicialmente para el fallido anillo ferroviario.

El fiasco de Antequera y el ERE de la valenciana Zeleros

Zaragoza no es la primera ciudad española en el mapa del hiperloop en Europa. Antequera estuvo en el radar de Elon Musk. Hyperloop One acordó con Adif en 2018 la creación de un centro de investigación y desarrollo en Andalucía. Sin embargo, dos años después todo quedó en agua de borrajas. Los estadounidenses se echaron atrás y la instalación malagueña, que costó 10 millones de euros, se esfumó. Poco después, Adif preparó un concurso público para alquilarla la nave.

Valencia es otra de las ciudades españolas en la órbita del hiperloop. La start-up Zeleros apostó por esta tecnología y presentó varios avances en el desarrollo de la cápsula supersónica para pasajeros y mercancías. Sin embargo, hace apenas dos semanas presentó un expediente de regulación de empleo par ala mitad de la plantilla (afecta a 26 de 58 trabajadores) y anunció que aparcará su proyecto estrella para centrarse en «el mercado de la movilidad eléctrica y conectada, con productos y clientes reales».

Este contenido es exclusivo para suscriptores

Disfruta de acceso ilimitado y ventajas exclusivas

Publicidad