Simón pide a quienes se desplazarán en Navidad que tengan cuidado ya

Simón ha enviado este mensaje el mismo día en que la pandemia repuntó en España. El Ministerio de Sanidad contabilizó desde el viernes 21.309 nuevos positivos, una cifra superior a los 17.681 del fin de semana pasado. Pero la peor noticia llegó desde el lado de la incidencia acumulada (la tasa de contagios por 100.000 habitantes en los últimos 14 días), que repuntó hasta los 193,65 casos, después de que en las últimas semanas hubiera descendido paulatinamente: el lunes pasado se encontraba en 215 y el último viernes, en 189.

Además, Sanidad ha computado 389 fallecimientos durante el fin de semana, una cifra similar a la del anterior, cuando se sumaron 394 muertes. Desde el inicio de la pandemia, en España ha habido 1.751.884 contagios de coronavirus y han fallecido 48.013 personas, según los datos oficiales del Ministerio de Sanidad, que únicamente registra a aquellas víctimas que han dado positivo en una prueba PCR.

Respecto a la hospitalización, actualmente 11.736 pacientes están ingresados por covid en toda España (11.648 el viernes) y 2.068 en UCI (2.100 el viernes). La tasa de ocupación de camas ocupadas por coronavirus se sitúa en el 9,61% (9,22% el viernes) y en las UCI, en el 21,68% (21,98% el viernes).

«Estamos en una situación delicada», reconoció Simón, ya que en vez de una caída, el país está en una «meseta». «Y eso no nos interesa», recalcó el responsable de Emergencias. Las causas de este cambio de tendencia no se explican todavía por el Puente de la Constitución, cuyas consecuencias, según dijo Simón, podrían verse en los próximos días, sino a la «relajación de las medidas» que decidieron algunas comunidades autónomas en los primeros días de diciembre, al comprobar que sus datos estaban mejorando.

Ante esta situación, el Ministerio de Sanidad no descarta que en el Consejo Interterritorial del miércoles algunas comunidades planteen el endurecimiento de las restricciones pactadas en el plan de Navidad. De cualquier forma, Simón volvió a apelar ayer a la responsabilidad individual. «Debemos ser conscientes de que la relajación de algunas medidas permite una cierta vida social y económica, pero eso no implica que debamos relajar las medidas propias ni con los familiares y allegados. No hay que relajar las medidas que nos atañen a cada uno de nosotros. No es cuestión de prohibiciones o no prohibiciones, sino de razonamiento», expuso.

La incidencia acumulada jugará un papel vital en la campaña de vacunación, que comenzará en la primera semana de enero. Simón alertó de la «falsa sensación de seguridad» inmediata que puede generarse en quienes reciban la vacuna, cuando en realidad, la inmunización sólo se completa una semana o diez días después de haberse administrado la segunda dosis, que se inyecta 21 días después de la primera. Es decir, hasta un mes después del primer pinchazo, una persona no está completamente inmunizada y en ese tiempo, puede contagiarse y contagiar.

«Cuanto más alta sea la incidencia, más probabilidad existe de que una persona que haya iniciado el proceso de vacunación o que vaya a empezarlo en los días siguientes pueda estar expuesta a una infección, y por lo tanto tener la enfermedad incluso con la vacuna recientemente puesta. Eso puede darnos una percepción equivocada de riesgo o de efectividad real de la vacuna. Por eso es importante llegar a la vacunación con las incidencias más bajas posibles», subrayó Simón.