2020: El año en el que todo giró en torno al coronavirus

Hoy termina 2020 y hace un año por estas fechas en pocos imaginarios se concebía la idea de que un virus iba a poner en jaque al mundo entero, pero así ha sido. Un día 31 de diciembre de 2019 fue cuando China comunicó de forma oficial a la OMS la aparición de una nueva neumonía, misteriosa por entonces. Una vuelta al sol después, se sabe ahora que era el coronavirus SARS-CoV-2, que causa la covid-19, una enfermedad que ha matado a cerca de 1,8 millones de personas.

Solo en España, este coronavirus, que casi no necesita ni presentación, se ha llevado por delante la vida de más de 50.000 personas, ha infectado a más de 4 millones (1,9 diagnosticadas) y ha puesto en jaque al sistema sanitario, económico y social del país. Descubierto por primera vez en Wuhan (China), a finales de 2019, se ha convertido en protagonista de la mayor pandemia que ha conocido el mundo en el siglo XXI.

Son 365 días en los que el virus ha seguido su camino, mientras científicos del todo el mundo han trabajado para frenar su marcha. Trabajo cuyo fruto ha sido desarrollar diferentes vacunas en un tiempo récord, apenas nueve meses, contando con que la media suele ser de unos 10 años. Mientras, estas son las cifras que ha dejado tras de sí el coronavirus:

Día a día, los datos, complejos y variables, han ido engrosando listas de nombres propios que se cuentan por miles o millones. Un conteo que no cesa y que, según los últimos datos revisados y provisionales del Ministerio de Sanidad, se ha desarrollado en España del siguiente modo:

En total son ahora más de 82 millones los contagiados diagnosticados en todo el mundo. No obstante, teniendo en cuenta que es una enfermedad en la que los síntomas pueden ser muy leves o ni siquiera desarrollarse, es posible que una buena parte de los infectados nunca vaya a ser diagnosticado.

De hecho, hay expertos que aseguran que no es posible comparar los datos de la primera y la segunda ola, entre otras cosas porque la capacidad de detección antes era mucho menor. En este sentido, el Gobierno de España ha realizado a lo largo de este año cuatro rondas del denominado Estudio Nacional de sero-epidemiología ENE-COVID, que han revelado que la prevalencia global de anticuerpos IgG frente al SARS-CoV-2 desde el inicio del estudio se sitúa en un 9,9%. Es decir, que unos 4,6 millones de personas en España, casi uno de cada 10, habrían tenido contacto con la enfermedad.

Sobre los fallecidos, las diferencias entre las diferentes contabilidades son también grandes. Según Sanidad, que notifica en su mayoría a quienes mueren con un diagnóstico previo, son poco más de 50.000 los decesos. Por otro lado, el exceso de mortalidad en España durante la pandemia se eleva a 72.947 personas, según el INE, con datos de finales de noviembre, y a 71.063, según el Informe MoMo (Instituto Carlos III), con datos a 21 de diciembre. Además, un análisis del INE ha concluido que en la primera ola del virus (entre marzo y junio) murieron por covid 45.684 personas en España. Son 18.557 más que las contabilizadas entonces por el Ministerio de Sanidad.

En cuanto a la comparativa mundial, hay que tener en cuenta que la metodología de conteo puede variar entre unos países y otros y que los datos dependen también de factores como el número de pruebas realizadas, si estas alcanzan más casos leves, la demografía, los recursos sanitarios…

Estos números, que muestran la cara más cruel del virus, cuentan también cómo la pandemia que cumple ahora un año ha cambiado el mundo. Cómo las mascarillas, que parecían impensables, al menos en España, el lavado de manos o la distancia social han llegado para quedarse. Y cómo, pese a muchos factores, la humanidad ha sacado músculo para intentar limitar al virus. Sin que haya acabado la pesadilla de la covid-19, aquel imaginario en el que no cabía una pandemia se ha dado de bruces con la realidad.

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