Agrede a una trabajadora sanitaria y le deja la mano impedida

Tras estos hechos, la víctima fue derivada a la mutua «Solimat» que desde el año 2012 atiende al personal del Servicio de Salud de Castilla-La Mancha (SESCAM). Sin embargo, el médico que la atendió se negó a concederle la incapacidad temporal argumentando que los daños físicos y psicológicos -sufrió una crisis de ansiedad- no eran motivo de baja laboral. Con esta respuesta acudió a su médico de familia, que sí le ha concedido la baja por enfermedad común ante la agresión sufrida.

A raíz de este caso, el sindicato CSIF reclama más medidas de seguridad en el Centro de Salud de La Puebla de Almoradiel como el cerramiento del área administrativa con el fin de que ningún paciente pueda entrar en contacto directo con los profesionales sanitarios. También pide la instalación de un pulsador antipánico en todos los puestos de trabajo conectado a una central para que pueda avisarse a las fuerzas de seguridad ante una nueva situación de violencia y que se recupere la figura del vigilante de seguridad con que contó el ambulatorio de este pueblo de 5.200 habitantes en el pasado.