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La cuarta ola, ahora sí, tras jornadas de titubeos parece en claro retroceso en España. Por octavo día consecutivo, la incidencia acumulada (IA) a 14 días cayó. En solo 24 horas descendió de los 213,90 casos por cada 100.000 habitantes hasta los 205, ... 52 positivos, confirmando la aceleración en el descenso que ya comenzó a inicios de esta semana. España no rozaba los dos centenares de casos desde mediados de abril, poco antes de que el país tocara el techo de esta cuarta embestida del virus con 235 casos de IA.
Las estadísticas de Sanidad sumaron 6.317 nuevos contagios, una cifra muy por debajo de la media de las dos últimas semanas, pero que no es demasiado de fiar porque los técnicos del departamento que dirige Carolina Darias llevan dos días ‘limpiando’ las tablas de datos duplicados. Y si el martes tocó sacar 1.837 falsos casos de Cataluña, hoy le tocó el turno a Castilla y León, que restó de las estadísticas 1.273 contagios duplicados.
Pero al margen de estos ajustes, el resto de indicadores ‘profundos’ que revelan las tendencias futuras de la pandemia este miércoles fueron especialmente positivos. La incidencia acumulada a 7 días se situó en 87,37 casos, mucho menos de la mitad de los 213,90 positivos a 14 días, lo que augura que la transmisión del virus seguirá cayendo en la próxima semana. El otro gran parámetro que miran en el Centro de Coordinación de Alertas y Emergencias Sanitarias (CCAES), la positividad (el porcentaje de pruebas positivas sobre el total de test realizados) disminuyó del 6,84% % al 6,75%. Una caída de apenas nueve centésimas pero que confirma una semana de descenso continuo en el porcentaje de test positivos.
La franca mejora de los datos epidemiológicos comienza a reflejarse en el descenso de la presión asistencial, pero lo cierto es que en una proporción mucho menor. El número de ingresados tras un nuevo descenso ya roza los 9.000 enfermos (exactamente los 9.132), pero la caída en las ocupaciones de camas generalistas y de UCI por parte de pacientes de covid sigue siendo muy lento: la ocupación camas de planta cayó del 7,66% al 7,26% y la de UCI del 22,89% al 22, 25%.
Más negativo fue el comportamiento de la mortalidad, que parece bastante ajena al descenso de los contagios. El ministerio, que elevó a 78.566 el número de decesos oficiales desde el inicio de la pandemia, notificó 167 nuevos fallecidos, la cifra más alta desde el pasado 12 de abril.
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