La cuarta ola toca techo y España repite incidencia con 235 casos

Sin embargo, esta aparente estabilización de la cuarta embestida del virus sigue sin ser, ni mucho menos, homogénea. La IA descendió solo en 11 de los 19 territorios. Se trata de Andalucía, Aragón, Asturias, Baleares, Canarias, Castilla y León, Ceuta, Extremadura, Madrid, Melilla y Navarra.

Y es que a pesar de que son ya más de 10 millones de las personas vacunadas con al menos una dosis, lo cierto es que 8 territorios sigue en situación de riesgo extremo al superar los 250 casos de incidencia. La comunidad que peor situación presenta es Euskadi con 527 casos, seguida de Melilla con 437, Madrid con 393, Navarra con 368, Cataluña con 295, Ceuta con 277, La Rioja con 271 y Aragón con 266. «En el otro lado tenemos unas comunidades que se mantienen en incidencias bajas pero con algunos indicadores que nos animan a levantar medidas, como Baleares, Valencia y Murcia. Aunque, insisto, hay que ser muy precavidos», constató Fernando Simón, director del Centro de Coordinación de Alertas y Emergencias Sanitarias (CCAES).

«La evolución nos muestra muchos signos de esperanza, pero tenemos que aún ser muy prudentes porque todavía tenemos incidencias muy por encima de lo que serían deseables», admitió no obstante Simón, quien se mostró convencido este lunes de que el avance de la vacunación va a frenar definitivamente esta cuarta ola. «Hemos alcanzado casi los cuatro millones de vacunados con 2 dosis en España. Exactamente 3.947.465 de personas, el 8,3% de la población. Estos datos nos hace pensar que el virus no va a llevarnos a situaciones como la segunda y la tercera ola», se congratuló el jefe de la epidemiología nacional.

Que la cuarta embestida podría estar empezando a ser embridada también lo confirmaría otro de los indicadores que miran muy de cerca en el CCAES, la positividad, o sea el porcentaje de pruebas positivas sobre el total. Este índice se situó este lunes en un 7,40%, seis centésimas por debajo del viernes, encadenando ya prácticamente dos semanas de descenso continuado que augura una caída en los casos en las próximas jornadas. «Es posibles que mantengamos unos días los contagios estancados y después bajemos. Soy optimista», auguró Fernando Simón.

Donde no se aprecia todavía la relativa mejora epidemiológica es en la presión asistencial, que este lunes empeoró de forma importante, tras varias jornadas en la que las estadísticas se habían mantenido relativamente estables. El número de enfermos ingresados por covid volvió a pasar el listón psicológico de las 10.000 personas. Exactamente fueron 10.380 pacientes. El porcentaje de camas hospitalarias ocupadas con enfermos de la covid pasó en 72 horas del 7,93% al 8,26%, mientras que el de ocupación de UCI aumentó en ese mismo periodo del 22,80% al 23,35%. O lo que es lo mismo, el sistema sanitario nacional se sitúa de nuevo al borde de la ocupación crítica de UCI del 25% que marca la situación de «extremo peligro» de desbordamiento. Aunque este dato está lejos del récord del 45% de ocupación al que se llegó en la tercera ola, lo cierto es que 7 comunidades y las 2 ciudades autónomas sí que superan ese 25% que marca el riesgo máximo.

También la mortalidad siguió en niveles muy altos, ajena a la ralentización de los contagios. Sanidad notificó 147 fallecidos durante el fin de semana, lo que elevó el balance total de muertos por la pandemia a 77.738.