Este año, quienes no terminen a tiempo de tomarse las doce uvas al ritmo de las campanadas del reloj de la Puerta del Sol tendrán una segunda oportunidad. Tras el mágico momento que marca la frontera entre la Nochevieja y el Año Nuevo, la maquinaria ... del emblemático cronógrafo madrileño se parará y sus agujas se retrasarán unos 75 minutos para dar, otra vez, las doce de la noche.
Publicidad
El motivo lo explicaron este viernes en Madrid el presidente de esta comunidad autónoma y el de Canarias, Ángel Garrido y Fernando Clavijo, respectivamente. No es más que una «iniciativa de promoción» de las islas afortunadas, que este año tomarán las uvas al ritmo del reloj madrileño. No se trata de que Ramón García haga doblete con su capa al narrar el evento a los telespectadores, sino de que la Puerta del Sol tendrá «hora canaria».
Así pues, tras escuchar los cuartos, ver bajar la bola y tomar las doce uvas, los encargados del mantenimiento del reloj atrasarán las manecillas hasta las 23:45 horas a la espera de que las cadenas de televisión nacional y autonómica de Canarias conecten de nuevo con la Puerta del Sol para ofrecer las campanadas en horario insular. La céntrica plaza madrileña «será así más que nunca el gran espacio de encuentro de nuestro país, de esta España unida que quiere seguir estándolo», destacó el presidente madrileño. Ambos dirigentes autonómicos desligaron la iniciativa del posible cambio del uso horario que tendría lugar el año próximo. En todo caso, Fernando Clavijo sí avanzó que durante las campanadas que se emitirán para las islas toda la Puerta del Sol «se llenará de contenido canario».
Este evento se sumará a los muchos que el emblemático reloj ha vivido en sus 152 años de historia. Este icono madrileño se debe al prestigioso y enigmático relojero leonés afincado en Londres José Manuel Rodríguez Conejero, que lo donó al Ayuntamiento de la capital. Tardó tres años en construir la maquinaria y afinar todos los resortes y engranajes. Ubicado en el torreón del edificio al que se le colocó un templete, fue inaugurado el 19 de noviembre 1866 por la reina Isabel II, que ese día celebraba su cumpleaños.
El nuevo reloj, el actual, reemplazaba al viejo e impreciso reloj que se alzaba sobre la entonces sede de la Gobernación. Pese a su gran tamaño, el reloj de la Puerta del Sol es sumamente preciso y solo se retrasa cuatro segundos al mes.
Publicidad
Sufrió daños en sus esferas durante la Guerra Civil, luego pasó a ser el sonido con el que Radio Nacional de España daba sus señales horarias, pero no fue hasta diciembre de 1962 cuando este reloj se convirtió en el símbolo de la Nochevieja. En ese año, TVE comenzó a emitir en directo las campanadas desde la Puerta del Sol. El próximo 31 de diciembre habrá que preparar 24 uvas de la suerte si se quiere repetir el rito.
Disfruta de acceso ilimitado y ventajas exclusivas
¿Ya eres suscriptor? Inicia sesión
Te puede interesar
Publicidad
Utilizamos “cookies” propias y de terceros para elaborar información estadística y mostrarle publicidad, contenidos y servicios personalizados a través del análisis de su navegación.
Si continúa navegando acepta su uso. ¿Permites el uso de tus datos privados de navegación en este sitio web?. Más información y cambio de configuración.