Las temperaturas más bajas en 60 años complican el final del temporal

La noche fue gélida en el interior de la península y, sobre todo, en la zona del país que los meteorólogos llaman 'el polo frío español', entre las localidades de Teruel, Calamocha y Molina de Aragón, una superficie de 2.000 metros cuadrados entre las provincias de Teruel y Guadalajara. Teruel, con -21 a las 8.20, fue la capital de provincia que registró una temperatura más baja, pero otras siete contabilizaron mínimas por debajo de los diez grados bajo cero: Toledo (-13,4), Madrid (-13,2), Albacete (-11,2), Salamanca (-11,9), Ávila (-10,6), Cuenca (-10,8) y Guadalajara (-10,5). La alerta roja por frío se extendió este martes a 41 provincias.

«Las heladas han sido generalizadas. Se han producido en todo el país, salvo en los litorales. Es posible que estemos ante una de las noches más frías en nuestro país en muchas décadas, aunque para hacer una valoración más precisa necesitaremos más datos», apunta Rubén del Campo, portavoz de la Aemet.

La explicación a estos valores térmicos tan bajos se halla en tres factores: «Las bajas presiones anticiclónicas, el viento en calma y sobre todo, la abundante capa de nieve en el suelo», detalla Del Campo. «La nieve no absorbe la luz del sol durante el día, y eso hace que el enfriamiento del suelo, que no ha recibido calor, sea muy intenso», subraya el portavoz de la Aemet.

Con estas temperaturas, que se mantendrán hasta el final de la semana, el retorno a la normalidad en el centro del país continúa lejos de llegar. Porque a los problemas habituales del frío se une otro, inesperado, pero tremendamente dañino: el hielo en las calles de pueblos y ciudades está provocando multitud de caídas, que se convierten en fracturas (de muñeca, de cadera, de fémur o de tobillo) y que están colapsando las urgencias de los hospitales, ya de por sí en una situación crítica ante el enorme repunte de casos de covid-19 tras las fiestas de Navidad.

En Madrid, los hospitales y los centros de salud han atendido en los últimos días a 2.000 personas por roturas de huesos y contusiones tras un resbalón. En el hospital de Toledo se atendieron 152 en un día y en el Hospital de Guadalajara, únicamente este martes, 35 fracturas de cúbito y radio, cuando en un mes tratan en total 25.

Las noticias positivas llegan desde las carreteras: el número de vías afectadas descendió este martes a 486, con 95 cortadas y 92 en las que es necesario el uso de cadenas. El transporte ferroviario de media y larga distancia se ha reestablecido, aunque con retrasos por las placas de hielo, y en Barajas amplían su funcionamiento de forma gradual las dos terminales que estaban operativas, la T-1 y la T-4.

Mientras tanto, el debate político se centra en la posibilidad de que Madrid sea declarado como zona catastrófica. El Gobierno anticipó este martes que se tomará su tiempo antes de decidir sobre este asunto. La portavoz del Ejecutivo, María Jesús, y el ministro del Interior, Fernando Grande-Marlaska, explicaron que los ministerios están evaluando los daños causados por la borrasca 'Filomena' y por la ola de frío, y sólo cuando esta evaluación haya concluido estudiarán la declaración de zona gravemente afectada por una emergencia de protección civil (el nuevo término para hablar de zona catastrófica).

Marlaska amplió el foco y afirmó que no sólo Madrid, sino todas las zonas afectadas por el temporal, podrán solicitar esta calificación, que también puede otorgarla de oficio el Gobierno. Este martes, la Junta de Castilla-La Mancha, presidida por el socialista Emiliano Page, anunció que estudiará la posibilidad de solicitar esta denominación, que implica ayudas a las administraciones de los lugares que han registrado las incidencias, subvenciones a los particulares cuyas casas han resultado dañadas y en general, compensaciones a los afectados.

Las diferentes opiniones del Gobierno central, por un lado, y por otro, del Ayuntamiento y la Comunidad de Madrid, que exigen que la declaración de zona catastrófica sea inmediata, elevaron el tono de la bronca política. Montero acusó a la presidenta madrileña, Isabel Díaz Ayuso, de utilizar la polémica para ocultar su mala respuesta al temporal. Ayuso utiliza este asunto para confrontar contra el Gobierno de España y no «dar explicaciones respecto a su propia gestión», criticó Montero.

Un total de 41 provincias han estado este martes en aviso de distintos tipos por temperaturas mínimas, en una jornada en la que han destacado las heladas fuertes en Madrid, Castilla-La Mancha, este de Castilla y León y áreas de montaña, alcanzándose localmente temperaturas mínimas inferiores a los -15ºC en localidades de Zaragoza y Teruel, según Aemet.

Con avisos rojos (riesgo extremo) han estado Teruel, Zaragoza, Avila, Burgos, Segovia, Soria, Albacete, Cuenca, Guadalajara, Toledo y Madrid; en naranja (riesgo importante) Cantabria, Salamanca, Ciudad Real, Barcelona, Girona, Lleida, Orense, Castellón y Valencia amarillo (riesgo) Almería, Cádiz, Córdoba, Granada, Huelva, Jaén, Sevilla, Huesca, León, Palencia, Valladolid, Zamora, Cáceres, Badajoz, Lugo, A Coruña, Murcia, La Rioja y Alicante.