'Macrocalvo' de un pueblo Cuenca contra una granja porcina

Las imágenes de vecinos de todas las edades enseñando el culo contra el proyecto en una especie de 'performance' rural han inundado de comentarios las redes sociales. Pero detrás del humor de tal acción existe un temor real: la explotación porcina intensiva que va a ampliarse albergará 44.000 lechones y consumirá 12 millones de litro de agua al año y, lo que es peor, generará 39 millones de litros de purines que, según la Plataforma Stop Macrogranjas, acabará contaminando el acuífero del que bebe Quintanar del Rey.

«Nos sentimos desprotegidos ante una compleja normativa que siempre termina favoreciendo a los grandes promotores de granjas intensivas de cerdos desatendiendo por completo la voluntad de los pueblos en los que se instalan», lamenta su portavoz, Antonio Escribano. Según este grupo, las obras son ilegales porque la Consejería de Desarrollo Sostenible de Castilla-La Mancha las suspendió de oficio en 2020 al comprobar que la empresa porcina no había detallado en sus informes la cercanía de la explotación a un pozo de agua. Además, la Confederación Hidrográfica del Júcar avisó en su día a la promotora de la ausencia de petición para explotar los recursos hídricos que necesitará la granja intensiva (12 millones de litros anuales).

«Nadie entiende cómo hay administraciones, organismos y políticos con nombres y apellidos que firman autorizaciones ambientales tapándose ojos y oídos ante lo que ya se ha constatado en otros pueblos que han dejado de tener agua potable a consecuencia de los purines filtrados en los acuíferos y ante lo que dicen los datos objetivos de todos los expertos consultados», añade el portavoz de esta plataforma que cuenta con el apoyo de todos los grupos políticos del Ayuntamiento de Quintanar del Rey (PSOE, PP y Unidas Podemos) de cuyo edificio cuelgan grandes pancartas donde puede leerse «No a la macrogranja. La salud es lo primero».

Los vecinos recuerdan que este pueblo vive del campo y advierten que si el agua se contamina Quintanar del Rey dejará de tener futuro y pasará a engrosar la lista de los pueblos de la España vaciada.