El Gobierno garantiza alimentos y vacunas pese a los 7.100 camiones retenidos

Para evitar el desabastecimiento de los supermercados, con imágenes que puedan recordar a los primeros días de la pandemia en España, el Gobierno ha anunciado este domingo que abrirá corredores para que los camiones que han permanecido en algunos casos durante 48 horas retenidos en áreas de servicio de las carreteras («embolsados», como se ha denominado a esta incidencia durante el temporal) puedan completar sus itinerarios y entregar sus mercancias en los puntos de destino.

Según los datos del Gobierno, hasta las 17 horas de ayer se habían 'desembolsado' 4.200 camiones que quedaron atrapados en Castilla-La Mancha, Castilla y León, Madrid, Aragón, la Comunidad Valenciana y Andalucía. Otros 7.100 camiones seguían retenidos en 28 puntos de servicio, y se les pretendía dar salida durante la noche o ya este lunes.

Además de los corredores terrestres, el Gobierno afronta otro reto por el aire: como cada lunes, debe llegar el nuevo cargamento con unas 380.000 vacunas que la empresa Pfizer envía desde Bélgica semanalmente. Con el aeropuerto Adolfo Suárez-Madrid Barajas abriendo gradualmente, los ministros del Interior, Fernado Grande-Marlaska, y de Transportes, José Luis Ábalos, anunciaron la puesta en marcha de un operativo que permita el aterrizaje de las dosis para que así continúe la campaña de vacunación.

«Hemos tomado las medidas precisas para la distribución de las vacunas en los centros sanitarios correspondientes y para garantizar su depósito», afirmó ayer Marlaska. El ministro explicó que el Gobierno mantenía ayer el plan de que las vacunas llegaran a los seis aeropuertos a donde lo han hecho desde diciembre (Madrid, Vitoria, Canarias, Valencia, Barcelona y Sevilla), pero en el caso de que no pudieran hacerlo en Barajas, las correspondientes a la zona centro aterrizarían en Vitoria y desde allí viajarían por carretera hasta Madrid.

«Mantenemos un contacto permanente, dinámico, en el que ajustamos el dispositivo previsto a la operatividad de Barajas, así como el estado de las carreteras limítrofes», ha indicado Marlaska. Su departamente juega un papel clave en el suministro de las vacunas, ya que la Guardia Civil custodia las dosis hasta que llegan a las comunidades. Durante el fin de semana, autonomías como Cataluña reconocieron que habían tenido que frenar la vacunación a causa de 'Filomena'.

Pese a las dificultades que se encontrarán los servicios de emergencias para limpiar las carreteras y a los problemas en los aeropuertos, el ministro de Transportes, José Luis Ábalos, insistió en que las vacunas llegarán «como estaba previsto» y afirmó que el abastecimiento general de productos sanitarios y alimentos «está garantizado».

Los últimos coletazos del temporal de nieve se sintieron este domingo principalmente en la zona noreste del país. Más de 700 vías estuvieron afectadas, según el Ministerio del Interior a través de la Dirección General de Tráfico (DGT), y 694 lo estaban aún durante la tarde. De ellas, 152 permanecieron cerradas al tráfico, tres de la red principal: la C-25 en Gerona, la TO-22 en Mocejón (Toledo) y la A-66 en Badajoz. En más de 400 carreteras era necesario el uso de cadenas.

Los operarios de Barajas y los miembros de la Unidad Militar de Emergencias (UME) pudieron despejar dos pistas del aeropuerto y por la tarde comenzaron las salidas de los aviones, pero la recuperación del tráfico aéreo será «gradual», dijo Ábalos. Mejor era la situación del sistema ferroviario: a partir de las 14.00 comenzaron a salir trenes desde Madrid, el primero de ellos con destino a Santander, y a lo largo de la tarde partieron otros hacia Málaga, Ferrol y Valencia, aunque la alta velocidad a Barcelona y los trenes a Huesca, Logroño y Pamplona fueron cancelados.

Pero la vuelta a la normalidad total se retrasará hasta finales de esta semana, según las previsiones del Gobierno, que ayer reiteró su mensaje de que la situación puede empeorar en los próximos días. «El peligro no ha pasado. Va a venir una ola de frío que convertirá la nieve en hielo, lo que multiplicará el riesgo», explicó Fernando Grande-Marlaska. «Se debe aplazar cualquier desplazamiento que no sea inevitable», reiteró, «y en los que lo sean, hay que tomar todas las garantías, como las cadenas. También debemos extremar nuestras precauciones en el día a día. Con esta ola de frío se pueden alcanzar temperaturas mínimas nunca alcanzadas, lo que nos exige más ejercicios de prudencia», subrayó el ministro del Interior.

La situación en Madrid continúa siendo muy complicada. Los medios de mecánicos de la comunidad, de la Dirección General de Carreteras regional y estatal y de los municipios de la región trabajan desde el sábado liberar los accesos y vías internas de las ciudades y el Gobierno de Isabel Díaz Ayuso ha pedido la colaboración de los ciudadanos para que retiren nieve y hielo de los accesos a portales, además de recomendar permanecer en el domicilio, no utilizar el vehículo particular, y en caso de ser necesario, hacerlo con cadenas.

Vecinos de Madrid, en el barrio de Usera o en los alrededores del Hospital Gregorio Marañón, se han echado a las calles para ayudar a retirar la nieve, organizados a través de las redes sociales.

Por ahora, el temporal ha dejado tres fallecidos: un matrimonio cuyo coche fue arrastrado por una riada en Mijas (Málaga) y un hombre de 54 años cuyo cuerpo fue encontrado bajo la nieve en Zarzalejo (Madrid).

Pero lo peor, según auguran los meteorólogos, está por llegar cuando la nieve se convierta en hielo. En su último aviso especial de este sábado, la Agencia Estatal de Meteorología (Aemet) explicaba que este domingo, con el alejamiento de la borrasca hacia el noreste, irán remitiendo las nevadas, aunque no las precipitaciones en algunas zonas del país. «El domingo y el lunes todavía son probables algunas lluvias intensas en el sur de Andalucía y Ceuta debido al acercamiento de una nueva borrasca», apunta la agencia.

Y Aemet augura nuevos problemas a partir del lunes, cuando «es probable que se produzca una estabilización general de la atmósfera, manteniéndose muy bajas las temperaturas, lo que hará que persista el manto nivoso en amplias zonas de la Península y dará también lugar a temperaturas mínimas excepcionalmente bajas». Esta situación se producirá desde el 11 de enero en amplias zonas del interior peninsular, hasta el jueves 14 de enero inclusive, con un grado de probabilidad 'muy alto' (mayor del 80 por ciento), subrayan.

En concreto, la agencia prevé que desde la madrugada de este domingo al lunes «se iniciará un descenso acusado de temperaturas nocturnas, que continuará la noche siguiente, con heladas fuertes en amplias zonas del interior y temperaturas mínimas que serán inferiores a -10ºC en zonas de montaña y áreas llanas con superficie nevada», lo que afectará «a puntos donde esta circunstancia es muy poco frecuente». En algunas zonas las máximas se quedarán «muy cortas», superando a duras penas los 0ºC, o incluso quedando por debajo de ese registro.