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Manuel García
Pedralba
Domingo, 3 de noviembre 2024, 10:27
Encoge el corazón la entereza del ser humano en las peores circunstancias. Ruth Rodríguez ha vivido una de las cientos de trágicas historias que se desperdigan por la provincia de Valencia. Este sábado encontró, entre los restos de su vivienda en Pedralba, el cuerpo de Francisco Quesada, de 44 años de edad.
Y a la tragedia propia de este hecho, que ya sería más que suficiente, se une la circunstancia. Fueron la propia Ruth, su familia y sus amigos las que tuvieron que desecombrar la casa para confirmar lo que ya se temía desde la tarde. Esta mujer ha denunciado que no lo ha encontrado «nadie de ningún servicio especial, sino nosotros apartando escombros y lodo en mi casa. Igual que el coche que apareció una hora antes. Lo encontramos y accedimos los primeros metiéndonos en el río para verificar que no estaba en él».
Esta vecina no tiene duda en que «tiene que haber responsables. Estoy segura de que se podrían haber evitado muchas muertes. Daños materiales no, pero sí muchas muertes».
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Su mujer recuerda que el martes a primera hora de la tarde Francisco le envió algunos vídeos de la crecida del río: «Yo le dije que fuera con cuidado», relata. «Me dijo que no me preocupara pero a las siete de la tarde su móvil ya estaba fuera de servicio», añade.
En la jornada del sábado, además del cuerpo sin vida de Francisco, también se confirmó la muerte de un matrimonio de nacionalidad inglesa de avanzada edad que vivía en el diseminado de Pedralba.
El domingo ha amanecido en Pedralba con una nueva batida para tratar de dar con las personas que aún siguen desaparecidas cinco días después del paso arrasador del agua.
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J. Molins / B. Hernández
José Antonio Guerrero
Andoni León, alcalde del municipio, ha explicado que tanto este domingo como el lunes les espera una ardua tarea de limpieza y ya se está recuperando el acceso a los diseminados para proporcionarles agua potable y alimentos. La recuperación de la cobertura telefónica también es otro pequeño paso para el ánimo. El suministro eléctrico se ha restablecido en casi toda la localidad y a través de la comunidad de regantes pueden tener agua no potable después de que la fuerza del temporal se llevara la tubería por delante.
«No hemos recibido ninguna ayuda», se lamenta la máxima autoridad municipal, quien explica que todo ha partido de la iniciativa de concejales, vecinos etcétera. Para la jornada de este domingo les han dejado un dron para que sobrevuele el término y poder descubrir algún desaparecido pero, por desgracia, esto no es suficiente.
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