Borrar
Una vista general de la Combre del Cambio Climático de Glasgow. Reuters
La matemática ventajosa del IPCC se adapta ahora a la queja de los pobres

La matemática ventajosa del IPCC se adapta ahora a la queja de los pobres

Glasgow da de nuevo la espalda a las reclamaciones de compensación histórica por daños climáticos

Iñigo Gurruchaga

Enviado especial a Glasgow

Viernes, 12 de noviembre 2021

Michael Wadleigh y Birgit van Munster forman una pareja original en la COP26. El estadounidense Wadleigh se formó en Físicas y dirigió el documental sobre el concierto de Woodstock, que ganó un Óscar en 1971. La sueca Van Munster es matemática y desarrolló una larga ... carrera con organismos de desarrollo sostenible en el este de África y luego en organismos globales.

Han compilado (onlyoneearth.science) unos datos únicos que ponen en duda la justicia de los programas sobre el calentamiento climático. Los estados miembros habrían disuadido al Panel Internacional del Cambio Climático(IPCC) de publicar los datos nacionales de emisiones. Los datos que publica el organismo de la ONU son globales y las reduccciones de emisiones exigidas también lo son.

Según el cálculo alternativo de Van Munster y Wadleigh, emisiones per cápita calculadas mediante el consumo de recursos naturales y el de productos domésticos o importados de productores extranjeros, obligarían a los 26 países de mayor nivel de desarrollo a reducir sus emisiones un 45% cuando la COP26 les exige un 4% anual en 2021-30 para contener el calentamiento en 1.5º. Los 31 menos desarrollados tendrían que reducirlas un 1%. Sus compromisos sugieren un aumento de un 1.1%.

La cumbre de Glasgow ha tenido una fase final de nuevo tensa, porque en un plenario informal convocado por el presidente de la conferencia, el ministro británico Alok Sharma, algunos delegados criticaron duramente la poca atención que sus borradores prestan a las compensaciones- también se utiliza el término 'reparaciones'- por pérdidas y daños medioambientales históricos.

El ministro de Exteriores de Tuvalu ya destacó en la cumbre de líderes en el inicio de la conferencia, por dirigirse a sus colegas con la mitad de su cuerpo en el agua. En la asamblea de este viernes, su delegado en Glasgow se llevó la ovación más larga, tras pronunciar un discurso emotivo sobre su isla y sus 10.000 habitantes, que estaría, según su Gobierno, hundiéndose por la subida del nivel del mar.

Prioridad

«Tuvalu es una nación llana en la frontera del cambio climático», dijo. «Nuestra tierra está despareciendo con rapidez. Nuestra tierra está literalmente hundiéndose. Debemos actuar ahora. Proponemos un lenguaje mñás fuerte sobre pérdida y daño.- Es un momento definitorio. Para nosotros es un asunto de vida y supervivencia». La ovación fue larga y calurosa.

Las últimas propuestas de la presidencia de la COP26 no alteran la tendencia declinante de las preocupaciones sobre pérdida y daño. Se creó una red Santiago, que no tiene fondos sustanciales para ayudar a unas islas cuyas poblaciones son en general pequeñas y sus circunstancias son variadas. Tampoco capacidad técnica para asignar daños concretos a fenómenos climáticos específicos.

La cumbre de Glasgow quiere, sin embargo, marcar un antes y un después por la prioridad que da a la adaptación a los cambios. Tanto por el orden que ocupa en el documento principal como por su longitud y sus propuestas, los organizadores han querido señalar la importancia que dan a la elaboración de planes nacionales que midan las necesidades para responder a fenómenos extremos y a su financiación.

Esta funcionalidad es exclusiva para suscriptores.

Reporta un error en esta noticia

* Campos obligatorios

leonoticias La matemática ventajosa del IPCC se adapta ahora a la queja de los pobres