Piden retirar los restos mortales de Milans del Bosch y Moscardó del Alcázar de Toledo

Los dos fueron defensores del Alcázar durante el asedio al que el edificio fue sometido por las tropas republicanas a lo largo de dos meses desde el levantamiento militar del 18 de julio de 1936. Moscardó, con rango de coronel por entonces, era el comandante militar de Toledo y se sumó al golpe de estado. Milans del Bosch hizo lo propio años más tarde, el 23 de febrero de 1981, como capitán general de la III Región Militar, haciéndose famosa su orden de que carros de combate patrullaran por las principales calles de Valencia apuntando a edificios como el Ayuntamiento o el Gobierno Militar.

Los restos mortales de ambos -Moscardó murió en 1956 y Milans del Bosch en 1997- se encuentran en una cripta del Alcázar en la que también están enterrados los demás defensores de este edificio que en 1936 era la sede de la Academia de Infantería de Toledo. Cripta en la que cada 1 de noviembre se celebra una misa organizada por la Hermandad de Nuestra Señora del Alcázar en homenaje a los allí sepultados.

En opinión del coordinador de Izquierda Unida en Castilla-La Mancha, Juan Ramón Crespo, «estos dos golpistas siguen disfrutando de privilegios gracias a los recursos públicos 44 años después del fin de la dictadura franquista».

El debate acerca de la exhumación de Moscardó y Milans del Bosch también ha llegado al Ayuntamiento de Toledo donde Unidas Podemos presentarán una moción pidiendo su salida del Alcázar: el Grupo Municipal Socialista considera que debe ser el Gobierno central el que tome esa decisión, Vox se opone, Ciudadanos votará a favor de la moción si hay consenso entre los grupos políticos y el Grupo Popular considera que hay otros asuntos más importantes que resolver en Toledo.