El Sacramentado reservará a Jesús de la Esperanza para el Vialucis del Sábado Santo

El patio interior de la Colegiata de San Isidoro vivirá los nervios y la tensión de otros años, pero este año lo será con un significado aún más especial. «Estamos aún con mucha precaución, y hay miedo a un repunte, pero necesitamos pasar por calles pequeñas porque sino no sería la Semana Santa de León», apunta el hermano mayor adjunto, Javier González.

Sentimientos encontrados entre los capillos más largos de la pasión leonesa. Entre las ganas y la precaución, los hermanos llegarán vestidos de azul marino para, con mascarilla, devolver a la capital su Semana Santa. «Esperemos que haga el típico día de León: bueno, pero fresco».

Las novedades que presentará el Sacramentado llegarán con su titular, el paso del cautivo, que sacará por primera vez la silla de Anás, creada en un taller sevillano. Además, la Virgen de la Esperanza lucirá nueva corona y nuevo manto.

En esta primera procesión, donde también estará la Piedad, no desfilará su cuarto paso, Jesús de la Esperanza. El 'resucitado' quedará reservado para el 'Vialucis' que tiene su salida en la madrugada de la vigilia pascual, del Sábado Santo al Domingo de Resurrección.

«El objetivo es sacar tres pasos y la procesión entera», insisten desde la cofradía. Para ello ya se ha contactado por teléfono con braceros y manolas para animarles a participar de los dos actos. «Están respondiendo casi bien. Tenemos un par de ensayos más por delante y en ellos intentaremos cerrar las listas».

También se modifica el recorrido, por las obras en la Rúa, y se ejecutará el plan preparado para el 2020. La procesión de Jesús de la Esperanza parará «de salida» a realizar la ofrenda floral al Cristo de la Victoria, y alcanzará la Catedral de León por Mariano Domínguez Berrueta, para regresar por las calles de Santa Marina y tomar el arco de San Isidoro por la plaza de Santo Martino.

Y este es el momento que más espera el hermano mayor adjunto: «Que salga la cruz de guía por el portalón del patio de Santo Martino y decir: hemos vuelto a la normalidad».